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CIUDAD DE MÉXICO, 8 de noviembre de 2019.- El senador de Morena Napoleón Gómez Urrutia quiere controlar el esquema de outsourcing en el país para su beneficio personal, como lo hace desde hace muchos años en el sector minero, en donde se enriqueció a costa de los trabajadores y por eso recientemente presentó una iniciativa para ‘regular’ ese mecanismo en la Ley Federal del Trabajo.
Así lo afirmó Tereso Medina Ramírez, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria Metal-Mecánica, Sidero-Metalúrgica, Automotriz y Similares de la República Mexicana, afiliado a la Confederación de Trabajadores de México (CTM).
Añadió, en un comunicado, que Gómez Urrutia ha chantajeado a las empresas de outsourcing lo mismo que hace con muchas de la industria minera, a las cuales bloquea instalaciones para obtener dinero.
Planteó que las empresas de outsourcing que contratan a personal externo en compañías mineras, durante años han sido esquilmadas por Gómez Urrutia, pues les pide dinero en cada ocasión cierran un convenio con las empresas.
El también representante de la Unión Nacional de Sindicatos Minero, Metalúrgicos y Metalmecánicos de México (UNASIM), que agrupa a 100 mil obreros de esos gremios en todo el país, indicó que Gómez Urrutia promueve amparos en contra del reconocimiento legal de otras organizaciones, porque su intención es controlar los contratos colectivos de trabajo para quebrar empresas.
«Napoleón no sólo está en contra de la UNASIM, sino también de los trabajadores de México, a quienes trata de manipular por todos los medios posibles incluidos las presiones y la represión”, enfatizó.
En un pronunciamiento, Medina Ramírez indicó que todos los actores relacionados con la minería: autoridades, empresarios, trabajadores y proveedores, forman un frente común para defender a ese sector en contra de enemigos de esa industria, como algunos malos funcionarios, ambientalistas falsos o seudo dirigentes sindicales como Gómez Urrutia.
Recordó que Gómez Urrutia es un economista, graduado en Harvard, que nunca fue minero y heredó la secretaría general del viejo sindicato de manos de su padre, Napoleón Gómez Sada.
Y destacó que es indudable la importancia del sector como motor de la economía, ya que aporta 2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) y genera 2.6 millones de empleos directos e indirectos.