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CIUDAD DE MÉXICO, 5 de marzo de 2025.- Con 88 votos a favor y 17 en contra, el Pleno del Senado de la República aprobó por mayoría calificada elevar a rango constitucional al maíz como alimento básico, sustancial, libre de modificaciones genéticas e identitario de los mexicanos, derivado de la reforma constitucional propuesta por la presidenta Claudia Sheinbaum.
El dictamen con proyecto de decreto reforma y adiciona diversas disposiciones de los artículos 4 y 27 de la Constitución, en materia de conservación y protección de los maíces nativos. Y fue respaldada en lo general con 97 votos a favor y 16 en contra. Se remitió a las legislaturas estatales y de la Ciudad de México para su aval.
Luego de poco más de tres de intensa discusión en lo particular, Morena, PVEM y PT con algunos votos de la oposición lograron la mayoría requerida al tratarse de una reforma constitucional que considera a México como el centro de origen y diversidad del maíz.
Al ser un elemento de identidad nacional, se protege en la Carta Magna este alimento básico y base de la existencia de los pueblos indígenas y afromexicanos, y se establece que su cultivo en el territorio nacional debe ser libre de modificaciones genéticas producidas con técnicas que superen las barreras naturales de la reproducción o la recombinación.
Todo uso del maíz genéticamente modificado debe ser evaluado para quedar libre de amenazas para la bioseguridad, la salud y el patrimonio biocultural de México y su población. Por lo que debe priorizarse la protección de la biodiversidad, la soberanía alimentaria y su manejo agroecológico; promoviendo la investigación, la innovación y los conocimientos tradicionales”, reza el proyecto de decreto.
Además, se establece que el Estado deberá promover las condiciones para el desarrollo cultural, económico y de salud, con el propósito de generar empleo y garantizar a la población campesina su bienestar y su participación e incorporación en el fomento de los cultivos tradicionales con semillas nativas, en especial el sistema milpa, para el óptimo uso de la tierra libre de cultivos de maíz genéticamente modificado.