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CIUDAD DE MÉXICO, 9 de febrero de 2018.- Tras el sismo ocurrido a las 08:05 horas de este viernes con epicentro en el municipio jalisciense de Cihuatlán, Jalisco, el Servicio Sismológico Nacional (SSN) indicó que la ocurrencia de temblores en la región de Colima-Jalisco es frecuente por el contacto entre las placas de Cocos y la de Norteamérica
El sismo de esta mañana fue percibido en Cihuatlán, Puerto Vallarta, Manzanillo y en otras localidades cercanas al epicentro.
Explicó que grandes terremotos han ocurrido a lo largo de la costa de Colima-Jalisco, como consecuencia de la subducción de las placas Rivera y Cocos por debajo de la placa de Norteamérica. De gran importancia es el terremoto del 3 de junio 1932 de magnitud 8.2 (19.5º N, 104.25º W) ubicado en la interfase entre las placas de Rivera y Norteamérica, que fue seguido por un terremoto de magnitud 7.8 el 18 de junio de 1932.
El 9 de octubre de 1995, un terremoto de poca profundidad y de magnitud 8.0, ubicado en 18.79º N y 104.47º W, tuvo un área ruptura de 150 kilómetros cerca de los límites de los estados de Jalisco y Colima, y fue seguido por un tsunami de 5 metros de alto.
Dos meses después, el 11 de diciembre, otro terremoto, magnitud 6.4 se registró. Su ubicación estaba en la zona de deformación entre las placas de Rivera y Cocos. El mecanismo focal obtenido para ese evento deslizamiento lateral, lo que sugiere que puede haber tenido lugar en el límite de Rivera y Cocos.
Más recientemente, el 22 de enero de 2003, cerca de las zonas de origen de los terremotos de 1932 y 1995, ocurrió un sismo de subducción, con una magnitud de 7.2, y un área de ruptura de unos 45 kilómetros.
En su reporte especial, indicó que el mecanismo focal del sismo representa una falla de tipo inverso, que son características de la zona de contacto convergente entre las placas de Cocos y la de Norteamérica.
Cuando ocurre un sismo de magnitud considerable las rocas que se encuentran cerca de la zona de ruptura sufren un reacomodo, lo que genera una serie de temblores en la zona que reciben el nombre de réplicas.
El número de las réplicas puede variar desde unos cuantos hasta cientos de eventos en los próximos días o semanas de ocurrido el temblor principal. Hasta las 9:31 horas del 9 de febrero de 2018 se había registrado una réplica de magnitud 3.8.