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CIUDAD DE MÉXICO, 9 de septiembre de 2016.- Más de la mitad de los mexicanos cree que quien se quita la vida es pecador y una cuarta parte que el suicida no va al cielo, en tanto, 27 de cada cien piensa que la depresión lleva a la gente a atentar contra su vida, mientras que el 27.9 por ciento dijo que no se quitaría la vida por ningún motivo, según una encuesta del Gabinete de Comunicación Estratégica (GCE).
Además de pecadores, según dice la sociedad, 25 de cada cien dice que los suicidas se van al purgatorio, pero no es todo: quien atenta contra su vida son cobardes, es lo que dijeron 55 de cada centenar de personas consultadas.
El estudio de percepción, levantado por el Día Internacional Contra el Suicidio (10 de septiembre), indica que la cantidad de personas que considera que quitarse la vida por propia mano es pecado es constante, ya que en tres estudios (2014: 54.3 por ciento/2015: 56.9 por ciento /2016: 53.4 por ciento) ha manifestado esta posición.
Lo mismo pasa con quienes creen que los suicidas no son pecadores, alrededor del 41 por ciento en los tres años. Esto quizá tiene que ver con que 67 de cada cien entrevistados se confesaron católicos, 13 pertenecientes a otras religiones y 12 no creyentes.
Además de la depresión y los problemas económicos, entre las causas que llevan a matarse, los encuestados mencionaron falta de apoyo o abandono (6.1 por ciento), problemas familiares (5.8 por ciento), engaño de la pareja (4.6 por ciento) y problemas personales (3.9 por ciento), entre otros.
Para 49.4 por ciento de los mexicanos los hombres son más propensos al suicidio, mientras que 43.5 por ciento dice que las mujeres.
Más allá de la fe y la idea del pecado, 27.9 por ciento de los 600 entrevistados telefónicamente por GCE dijo que no se quitaría la vida por ningún motivo. El porcentaje es significativamente mayor al de 2015, cuando 20.8 por ciento de la gente decía que no atentaría contra su vida. El año pasado 22 de cada cien encuestados dijo que no sabía si era capaz de suicidarse y ahora tienen dudas 17.
Entre los que sí piensan que pueden llegar a matarse, 8.7 por ciento dijo que lo haría por razones económicas, 8.2 por ciento debido a una enfermedad incurable, 6.7 por ciento por hallarse en un callejón sin salida, seis por ciento por depresión y 4.1 por ciento por la muerte de una persona cercana.
Gabinete pidió a la gente que diera su opinión sobre algunas mentiras y verdades existentes respecto al suicida: