El presupuesto es un laberinto
La comunidad universitaria ha entrado en reflexión.
Está sorprendida por muchos hechos registrados por la UNAM, unos buenos y otros malos.
La llamada máxima casa de estudios del país ha vuelto a escalar en el ranking mundial y por supuesto eso es motivo de satisfacción.
Por algo el rector Enrique Graue y la institución han recibido muchos reconocimientos nacionales y, los más valiosos, internacionales.
Entre los negativos está la violencia.
El tema fue ayer valorado por el ataque a la Torre de la Rectoría, el rompimiento de vidrios, daños a murales y en general a la riqueza artística.
No era asunto de discusión, pero al final en diálogo aparte los altos funcionarios universitarios expresaron satisfacción por el manejo de Graue.
Si los testimonios escogidos fueran suficientes, se pensaría en la casi segura reelección del rector para otros cuatro años.
González Pérez y la CNDH
Los consejeros universitarios han valorado al menos tres elementos:
El primero es la provocación –“burda”, la calificó la propia UNAM en su boletín- de grupos considerados anarquistas.
Encapuchados cuya desenmascaramiento y castigo penal corresponde a la justicia de la Ciudad de México.
El segundo es la explicación dada por el gobierno de Claudia Sheinbaum sobre la mística de no combatir la violencia para no violar los derechos humanos.
Eso no lo entienden ni los universitarios ni los juristas.
Y el tercero, que no hay aspirantes de peso como hace cuatro años, cuando había otros favoritos pero –hoy lo saben– no se equivocaron los consejeros.
Hasta hace poco el contendiente natural con mayor peso parecía el presidente de la CNDH, Luis Raúl González Pérez.
Pero el ombdusman no puede abandonar esa institución cuando las acusaciones desde el poder minan la acción y la autonomía del organismo.
El futurismo es un ejercicio a partir de declaraciones individuales, no así una convicción generalizada de los universitarios: defender la autonomía de la UNAM.
Un gran reto en estos tiempos.
González Pérez y la CNDH fertinal, Gobierno e IP
1.- Desde distintos lados se analizan las críticas a la alianza empresarial del gobierno con el sector privado.
¿Quién quiere trastocarlos?
Se investiga cómo se generó –siembra en el argot de la 4t- la información sobre la compra Fertinal por Pemex publicado por The Wall Street Journal.
Un tema muy discutido, dicen en Palacio Nacional y en el Ajusco, ahora sacado por agentes de la ultraderecha.
Se trata, creen, de minar la relación de Ricardo Salinas Pliego con Andrés Manuel López Obrador.
En TV Azteca van más lejos: Fertinal era productiva y si hoy está detenida es culpa de Pemex.
Y 2.-Los OTT internacionales están en gran expansión en México.
Televisa trata de aprovechar la parte más rezagada de ese mercado con su nueva marca blim tv para atender las audiencias que buscan contenidos en español.
Agregará 30 nuevos canales en vivo a los cientos de contenidos ya ofrecidos desde 2016.
El potencial de audiencia es gigantesco, dice su directora Vanessa Rosas como prueban plataformas –You Tube, Facebook– con millones de horas de visitas con contenidos de la empresa de Emilio Azcárraga.
Y otro dato: aprovechará a los mejores productores de Univisión, Televisa, Telemundo, Atresmedia…