Frente a la guerra/Felipe de J. Monroy
Las negociaciones cada vez son más difíciles.
Por eso la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS) anunció su decisión de romper con el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi).
Alarma general.
Ante el amago, el director del Insabi, Juan Antonio Ferrer, prácticamente abandonó su oficina y se refugió la semana pasada en las de la Secretaría de Salud (SSA) y del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Negociaciones de emergencia y llamadas día y noche para evitar reencauzar las negociaciones y evitar el escándalo internacional.
Varios días fueron dedicados a ello con dos gestores auxiliares nuevos, el secretario Jorge Alcocer y el director Zoé Robledo.
Al parecer han conciliado, pues ayer se anunció la compra consolidada de 419 claves de medicamentos y material de curación.
Luego se verá cómo se resuelve la adquisición de las aproximadamente 600 claves pendientes para todos los organismos responsables de garantizar la salud de los mexicanos.
Y mientras…
Compras sin control
Todo debió quedar claro desde octubre pasado.
Por esas fechas debieron consolidarse las compras -un volumen aproximado de cinco mil millones de dólares, alrededor de 100 mil millones de pesos- y empezar las entregas a principios de año para todo 2021.
Pero no.
Si UNOPS no tiene experiencia para volúmenes tan altos, México tampoco se preparó para pagar cuanto debía con oportunidad: los 135 millones por comisiones más lo de medicinas e insumos médicos.
Porque hay un dato: las mayores operaciones conocidas del organismo de la ONU han sido por 150 millones de dólares a países centroamericanos, no 33 veces más.
Pero el Insabi trae su propio desastre: no paga a tiempo y, obvio, la UNOPS no compromete suministros si no tiene el dinero en caja porque a su vez no puede recurrir al mercado internacional.
Pronto puede haber noticias.
Ya se llamó a la tabasqueña Dayana Garrido para la Coordinación Nacional de Recursos Materiales del Insabi –las compras, pues– y a Francisco Pedrero.
En la urgencia, y al amparo de un oficio de febrero, deberán hacer compras de emergencia de medicinas donde haya y al precio que sea…
Y olvídese usted de normatividad y transparencia.
PRI y Alito a 2 fuegos
1.- Las cosas se le complican cada día más al Partido Revolucionario Institucional (PRI) y a su dirigente Alejandro Moreno, Alito.
Tiene razón cuando acusa intereses extraños, atizados desde el poder y su partido, para desestabilizarlo y buscar su caída.
Pero atrás hay un empeño específico: en lo interno ajustar cuentas por el desastre electoral y en lo externo deshacer la alianza opositora en la Cámara de Diputados.
Y 2.- otro escándalo nacional es cuanto sucede en la Universidad de las Américas de Puebla (UDLA).
Por una parte, la Fundación Mary Street Jenkins anunció ayer la recuperación de su patrimonio por mandato judicial.
Luego acusaron a las autoridades encabezadas por el rector Luis Ernesto Derbez de desconocer la sentencia y al final hasta la fuerza pública intervino.
Atrás está un supuesto desfalco superior a los 700 millones de dólares de la Fundación Jenkins y órdenes de aprehensión no cumplidas.