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MADRID, 13 de marzo (Quadratín México).– Los sindicatos de los trabajadores de tierra y vuelo y la aerolínea Iberia llegaron a un acuerdo con lo que se pone fin a los paros escalonados iniciados el pasado 18 de febrero.
Los trabajadores aceptaron la propuesta del mediador del conflicto, Gregorio Tudela, que reduce a tres mil 141 los despidos de un total de 3 mil 807 programados inicialmente por la compañía aérea española. Con ello, se cancelan los cinco días de huelga programados para la próxima semana.
El acuerdo entre ambas partes fue firmado en el Ministerio de Fomento y en éste se subraya que prorroga el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) en vigor hasta 2015.
El director de Recursos Humanos, José Luis Romero, y los representantes de los sindicatos CC.OO., UGT, Sitcpla, Asetma, USO y CTA-Vuelo firmaron la propuesta en un acto en el que estuvo como testigo la ministra de Fomento, Ana Pastor.
El documento propuesto por el catedrático Tudela contempla un ERE para tres mil 141 trabajadores, 16 por ciento de la plantilla, unas 700 salidas menos que el plan de reestructuración planteado por la compañía.
El acuerdo significa la cancelación de las cinco jornadas de huelga pendientes, del lunes 18 al viernes 22 de marzo, del total de 15 paros de 24 horas iniciados el pasado 18 de febrero, los cuales han abarcado un total de 10 días de inactividad, con la consabida suspensión de vuelos.
No obstante, el sindicato de pilotos Sepla, que no suscribió el acuerdo por considerar que no cumple “con unas garantías mínimas de futuro”, anticipó que no irá a la huelga la próxima semana y mostró su disposición a seguir negociando.
El conflicto surgió por el plan de reestructuración presentado por la compañía, que defiende que hay que actuar para garantizar la “viabilidad” de la compañía de bandera española y ajustarla a la nueva situación derivada de la crisis y de la subida del combustible.
Iberia anunció su recorte de personal al argumentar que pierde al día casi dos millones de euros.
A su vez, los sindicatos acusaron a la dirección de querer desmantelar la compañía en favor de su socia British Airways, con la que Iberia se fusionó en 2011 dando lugar a IAG.
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