Tras cátedra de Cochiloco y Mascarita, da lecciones con Barry el Sucio

CIUDAD DE MÉXICO, 23 de agosto de 2022.- Sabiendo que si te diviertes la audiencia también lo hace, Joaquín Cosío se pone el traje de Barry el Sucio en Lecciones para Canallas, que podría funcionar muy bien en su gama de personajes vistosos y completada por El Cochiloco (El Infierno) y Mascarita (Matando Cabos):

“Me gusta bastante que se aleja mucho de los otros; es decir, me da muchísimo gusto que estos personajes no tienen nada que ver: un luchador violento, con un sicario simpático y de pronto aparece un tercero, un bribonazo, este estafador, también simpaticón y creo que pudiera ser una tercera posibilidad, un tercer personaje que la gente recuerde, pero eso justamente lo decide el público”.

“Empezando el día charlando con ustedes”, vía Zoom, el actor rememora que en alguna ocasión alguien le dijo, sobre todo haciendo teatro, lo que hacía antes del cine: ‘si te diviertes, la gente se divierte’:

“Entonces lo primero que debes de hacer es divertirte tú y por fortuna los proyectos que he hecho, han sido enloquecidamente divertidos; qué decir del Barry el Sucio, un personaje bribonazo, de buen corazón, en un enredo fraterno, filial con una hija, con una novia muy simpática, en fin”.

Aunque Barry el Sucio es el maestro de Lecciones para Canallas, que se estrenará el primero de septiembre en 800 salas, también recibe clases, pues según Joaquín, tiene que aprender a abrir un poco su corazón, puesto que no se deja tocar sentimentalmente, por eso juega a las apuestas, el azar es su vida y las carreras de caballo:

“Pareciera que le gustaría andar en este caballo corriendo siempre de la responsabilidad, de los compromisos y de pronto aparece una hija que no puede borrar cerrando la puerta y eso lo tiene que obligar a reconsiderar toda esta estructura amorosa, emocional, que él ha trabajado para poder vivir o sobrevivir, en este ambiente turbio donde se desenvuelve”.

Al intérprete, Cosío, esta cinta dirigida por Gustavo Moheno también le dio lecciones, dado que el trabajo actoral no tiene fin, cualquier actor que considere que ya está formado o ya puede hacer cualquier papel, se equivoca un tanto.

“Por ejemplo en mi caso, había que aprender de la naturalidad impresionante que tienen Danae Reynaud y Diana Bovio, mis dos compañeras en el elenco y con toda franqueza, son extraordinarias, espontáneas; una espontaneidad que tienen ante la cámara, que siempre me impresionaba y decía: ‘hay que ponerte las pilas, hay que estar a altura de la frescura de ellas’”, reconoce el intérprete.

Sobre sus próximos proyectos en México y Hollywood, donde interpretó al General Mateo Suarez en El Escuadrón Suicida, fueron detenidos por un programa que tiene planteado su estreno en marzo siguiente:

“Fíjate que en algún momento llegaron alguna oferta, casting o varios casting, pero estuve trabajando en una serie que me tuvo ocupado durante seis meses; entonces, más bien me desconecté de las agencias y de esta búsqueda y ahorita, de alguna manera, retomo todo, porque acabo de terminar, cuestión de dos semanas, por ahí, la serie que se llama Ambulancia, de paramédicos”.

Y tiene que ver con “el mundo desconocido, para nosotros, de ese mundo nocturno de las ambulancias privadas y públicas, y todo este contubernio entre el mundo de la emergencia y de la vida nocturna; es la historia de una familia”.