Oran por la paz en el Centro de Chilpancingo
CIUDAD DE MÉXICO, 21 de diciembre de 2017.- La vaquita marina atrapada por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) con fines de investigación para su reproducción en cautiverio, murió de un paro cardíaco, explicó el titular de la dependencia, Rafael Pacchiano.
“Los resultados preliminares que me han compartido de manera extraoficial es que la vaquita murió de un paro cardíaco, más relacionado con la edad de la vaquita que con el tema de haberla mantenido en cautiverio. Hemos tomado la decisión de no continuar con las capturas para no arriesgar ni comprometer el número de la población”, indicó el funcionario federal a medios de comunicación.
Pacchiano aclaró que ello no significa que no se continúen los esfuerzos para evitar la extinción de la Vaquita marina, de la cual hay entre 30 a 60 ejemplares solamente. El siguiente proyecto es la creación de granjas de cría de totoaba, especie que al ser cazada afecta a la vaquita marina, que queda atrapada entre las redes de los pescadores.
“El siguiente punto y lo presentaremos a detalle el próximo año es cómo generar un mercado legal de totoaba que hoy es la principal causa de muerte de vaquita, para que se pueda abastecer la demanda actual y no poner en riesgo a la vaquita con totoaba que haya sido criada en cautiverio y cuyo aprovechamiento no implique riesgo para la vaquita”, explicó el funcionario.
El modelo a seguir son los proyectos de la las universidades Autónoma de Baja California y la de Sonora que ya cuentan con granjas, y replicarlas en las comunidades de San Felipe y Santa Clara, en el golfo de California.
“Es mejor para fines de vaquita garantizar que sea puro aprovechamiento de totoaba cultivadas en granja y porque eso nos permite la posibilidad de hacer exportación a mercado chino en la legalidad”.
Para ello el gobierno federal ya trabaja en modelos financieros y en una posible inversión para apoyar dichos proyectos, adelantó.
“Una vez que tengamos el modelo exacto ya pondremos tener esos datos, en los primeros días de enero haríamos la comunicación oficial”, recalcó.
Respecto a qué se hará con la infraestructura en la que se planeaba poner a vaquitas marinas en cautiverio y buscar su reproducción similar a lo que se hizo con el lobo mexicano, Pacchiano dijo que se puede usar aún.
“La captura y estamos definiendo que se puede hacer con esa infraestructura porque es algo que puede servir de mucha ayuda para labores de investigación”.
La vaquita marina hembra fue atrapada el 5 de noviembre, fue llevada a un corral flotante especialmente modificado conocido como El Nido, pero su salud comenzó a deteriorarse y el Comité Vaquita, Conservación, Protección y Recuperación (Vaquita CPR) decidió liberarla, pese a lo cual falleció un día después.
El proyecto Vaquita CPR tuvo un costo de 3 millones de dólares.