Teléfono rojo/José Ureña
Falsa ilusión
La vacuna contra el Covid es deseo universal. La euforia se desata cuando varios gobiernos del mundo anuncian planes de vacunación para este mes. Se genera la ilusión de que la pandemia está próxima a terminar, pero tal ilusión debe tomarse con mucha cautela.
Por ejemplo, México compró 34.4 millones de la vacuna Pfizer, pero sólo llegarán de inmediato 249 mil dosis. Tres semanas después otras tantas. Por el estilo están los tiempos de las vacunas de AstraZeneca, Cansino y las demás.
Las vacunas llegarán, sí, pero a lo largo de todo 2021 y no de golpe. Mientras, el riesgo de contagio y muerte seguirá siendo muy elevado los próximos siete meses.
Especialistas de la UNAM alertan que la ilusión sobre el acceso universal a las vacunas, que aún no concluyen ensayos, puede ocasionar una distracción colectiva letal. Eso es lo grave.
Ante este panorama, sume el optimismo exagerado del Gobierno federal, al dar por hecho que diciembre será el comienzo del fin de la pandemia, sin explicar plazos y dificultades. Nos oculta la fecha realista para contar con las vacunas necesarias, que podría ser junio o julio del año entrante, cuando los medicamentos lleguen en cantidad suficiente.
El falso optimismo es un mensaje peligroso, propicio para relajar las medidas sanitarias entre la población y provocar el repunte letal de la epidemia en febrero y marzo.
Sin datos duros, precisos, la ilusión de tener vacunas pronto ocasionará que la población esperanzada quede en peligro de más contagios y muertes.
Que quede claro: la pandemia seguirá en pie de guerra.