VENTANA: Mucha esperanza, poca paciencia

20 de diciembre de 2012
 , 
9:31
José Cardenas

La idea de comenzar su sexenio a tambor batiente, podría llevar al Presidente de la República a tropezar una o varias veces.

Para cualquier mandatario –el mexicano no es excepción– el primer año es fundamental para impulsar las reformas y los programas que sustenten el resto de su gobierno. En ese lapso ha de invertir todo su capital político.

Conste, dijimos invertir, no gastar.

Es el tránsito de la “indulgencia” con caducidad, otorgada al inicio de cada sexenio ­–anota el periodista Jorge Fernández Menéndez–.

En el caso Peña Nieto, El principio del principio ha despertado expectativas… pero aun falta lo más difícil: ofrecer resultados contantes y sonantes.

Si la esperanza es mucha… la paciencia, poca.

Pero una cosa es arrancar pisando a fondo el acelerador y otra distinta acabársela gasolina en la primera vuelta.

Enrique Peña Nietoha lanzado su gobierno bajo el paraguas del llamado Pacto por México. El compromiso de los tres principales partidos sería la base de una relación constructiva con el Poder Legislativo. Sin embargo, a la hora de la verdad, la colaboración ofrecida en el Castillo de Chapultepec, ha enfrentado los obstáculos de la realpolitik.

No es lo mismo prometer ante los reflectores nacionales, que ceder cuando están en juego los grandes intereses.

Ya salió la Ley de Ingresos… y hoy podría quedar listo el Presupuesto de Egresos. Hubo sudor y lágrimas en torno a la reforma de la administración pública… y ahora, el atorón de las modificaciones constitucionales en materia educativa.

Todo esto sólo son los primeros avisos de negociaciones ásperas y victorias nada gratuitas.

El Presidente propone y el Congreso dispone. Regla número uno.

Aun así, Peña Nieto busca aprovechar su cuantioso capital político, –sus indulgencias–para mostrar el liderazgo demandado por los mexicanos… para obtener el apoyo a sus iniciativas y proyectos… y para persuadir –a quien lo dude– desde dónde se traza la ruta del país.

Sin embrago, el alto riesgo de ir por tanto en tan poco tiempo es el desgaste propio de las negociaciones y puede transformarse en una percepción de parálisis y falta de resultados. Si Peña Nieto logra minimizar dicho desgaste, llegará con fuerza a la negociación de las reformas verdaderamente fundamentales: la fiscal y la energética. De lo contrario, comenzará a perder la confianza de los casi 19 millones de ciudadanos quienes votaron por él… y dará la razón a los muchos adversarios empeñados en descalificar su victoria electoral.

MONJE LOCO: Investigadores de la Universidad de Harvard aseguran que Felipe Calderón llegará a una nube, por demás confortable, lejos de las amenazas de las pandillas delictivas y la frustración nacional por la fallida guerra contra el crimen. También le reconocen méritos por el manejo económico del país. Otros le cuestionan liderazgo y reconocimiento… Asumen como un desafortunado mensaje recibir a quien puede estar por encima de la ley.

PUNTO Y APARTE: Si mañana se acaba el mundo… desde pasado mañana les encargo a mis acreedores. No vaya siendo que el ciclo culminante de paso al apocalipsis…. Me basta y sobra con el invierno, nunca con el infierno. Con una era renovada… y una sociedad algo más civilizada.

[email protected]   @JoseCardenas1   http://josecardenas.net

QMX/jc

 

Te podria interesar