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EL CAIRO, 20 de junio (Quadratín México).- Informaciones confusas y contradictorias surgieron en las últimas horas sobre el estado de salud del ex presidente egipcio Hosni Mubarak, quien de acuerdo con la agencia estatal de noticias Mena, está clínicamente muerto.
Sin embargo, su abogado informó este miércoles que su estado de salud ha mejorado, después de que se intensificara su tratamiento anoche y negó su muerte clínica.
En medio de esas versiones, trascendió que el ex dictador fue trasladado de la prisión en que cumple condena hacia un hospital en el que se encuentra inconsciente y conectado a un respirador tras un accidente cerebral.
Con el paso de las horas, otras fuentes señalan que Mubarak ha tenido que ser reanimado, pero aún no ha muerto.
Las noticias llegan en un momento político muy complicado para Egipto, ya que la elección de su sucesor y las reticencias de la Junta Militar a ceder el poder, han sembrado de incertidumbre la transición egipcia.
En las primeras elecciones presidenciales libres de la historia del país, los Hermanos Musulmanes se adjudican el triunfo, al igual que Ahmed Shafiq, el último primer ministro de Mubarak. Está previsto que el próximo jueves se conozca el nombre del sucesor de Mubarak tras las elecciones presidenciales del fin de semana.
Mubarak fue condenado el pasado 2 de junio a cadena perpetua por no haber impedido la sangrienta represión que siguió a las multitudinarias manifestaciones que hace 16 meses terminaron por forzar su caída. Una 850 personas murieron en las protestas.
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