Suspensión de orden de aprehensión contra Yunes, por amparo: Cuitláhuac
SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 1 de mayo de 2019.- Las condiciones de la infraestructura vial y la capacidad en materia de movilidad que existen en una ciudad, impactan más de lo que se puede pensar en la vida de las personas; forman escenarios de los cuentos de la vida real.
Según datos referidos por la Unión de Usuarios de la Zona Industrial (UZZI), en el área fabril de San Luis Potosí existen 520 empresas en las que laboran más de 120 mil trabajadores, de los cuales se estima que un 30 por ciento, es decir, 36 mil personas, proviene de comunidades y municipios ajenos a la zona metropolitana. Dicho fenómeno se debe -principalmente- a dos factores: primero, el amplio desarrollo de la industria manufacturera en la entidad y segundo, la falta de mano de obra en la capital.
UN CASO DE MILES
Quadratín San Luis Potosí se dio a la tarea de atestiguar cómo es el traslado de una obrera que labora en la zona industrial y no habite en el área metropolitana.
Mayra Mercedes Galaviz Hernández, tiene 23 años de edad y es originaria del municipio de Salinas de Hidalgo. Su pueblo ahora es su dormitorio. El traslado de su casa a la empresa en la que labora es de dos horas y media, o sea invierte cinco horas en ir y venir de la planta Musashi, ensambladora japonesa de piezas automotrices.
En Musashi, ella produce a diario entre 300 y 400 componentes para las transmisiones y suspensiones de vehículos de diferentes marcas, en un torno del centro de maquinado.
Sus traslados, más ocho horas de jornada laboral, suman 13 horas. Si bien le va, duerme cinco horas y las seis restantes de un día son para cuidar y disfrutar de Rosalía, su bebé de 8 meses de edad; convivir con su familia, ver televisión, lavar ropa, comprar la despensa de la semana, entre otras actividades.
Más información en Quadratín SLP