
Ubican nuevo campo de exterminio en Reynosa, Tamaulipas
CIUDAD DE MÉXICO, 11 de marzo de 2025.- En México, cada día 10 mujeres son asesinadas, de acuerdo con el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y no Localizadas (RNPDNO), de diciembre de 2018 al mismo mes pero de 2020, se registraron 20 mil 400 casos de desaparecidas.
De acuerdo con la Encuesta Nacional Sobre la Dinámica de las Relaciones en los hogares (Endireh), el 66 por ciento de las mujeres de 15 años de edad o más han experimentado algún tipo de violencia.
Según los registros del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), durante 2023 se iniciaron 89 mil 253 carpetas de investigación por delitos contra la libertad y la seguridad sexual, lo que engloba acoso, abuso y violación.
Ante esta crisis, añadió Teltronic México en un comunicado, la implementación de herramientas tecnológicas para la protección de víctimas de violencia de género se ha convertido en una necesidad urgente.
Por lo que un grupo de especialistas en la materia crearon un sistema de protección con perspectiva de género, al que denominaron pulsera inteligente.
De acuerdo con Oscar Fernández, director de Teltronic México, “en un mundo ideal, ninguna mujer debería temer por su seguridad en el espacio público. Sin embargo, la realidad nos exige soluciones que garanticen protección y tranquilidad. La implementación de esta tecnología en México puede reforzar la seguridad de las mujeres que enfrentan acoso e inseguridad en las calles”.
El sistema, desarrollado por las organizaciones Lincoln Security y Teltronic de México, se diseñó para responder a un problema recurrente: muchas víctimas no pueden hacer una llamada o abrir una aplicación en una situación de peligro.
Anabel Banda Ruíz, especialista en prevención de la violencia y responsable de la implementación del programa en México, explica que “el gran reto es la velocidad de respuesta. En un contexto de agresión, no hay tiempo para desbloquear un teléfono. Este dispositivo permite que la víctima active la alerta sin que el agresor lo detecte, lo que ha hecho la diferencia en varios casos”.
La pulsera se encuentra vinculada a los centros de monitoreo Centro de Comando, Control, Comunicación y Cómputo (C4) y al Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano (C5) donde personal capacitado en atención con perspectiva de género coordina la respuesta inmediata.
Al activarse, el sistema envía la ubicación en tiempo real y prioriza los casos más urgentes, permitiendo que las unidades de seguridad lleguen a la víctima en el menor tiempo posible.