La nueva naturaleza del episcopado mexicano
Supera derrama económica los 28 mil millones de pesos
La Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) informa que, durante el primer semestre de 2024, se tiene registro de un acumulado de 28 mil 592 millones de pesos (mdp) de derrama económica por celebraciones de días festivos en la capital, entre los que destacan la temporada de Semana Santa y el Día de Reyes Magos, que en conjunto sumaron 12 mil 250 mdp.
El titular de Sedeco, Fadlala Akabani Hneide, indicó que la suma total de 28 mil 592 mdp se desagrega de la siguiente manera: Día de Reyes Magos, 5 mil 265 mdp; 14 de febrero, mil 966 mdp; venta de pescados y mariscos por Cuaresma, mil 602 mdp; Semana Santa, 7 mil 285 mdp; Día de la Niña y el Niño, 5 mil 5 mdp; Día de las Madres, 3 mil 595 mdp; Día del Padre, 2 mil 785 mdp; la Marcha del Orgullo LGBT+, con mil 89 mdp.
“Es importante mencionar el valor económico que tiene para la capital la celebración de los días festivos, en este primer semestre se vieron beneficiadas 363 mil 926 unidades económicas y aproximadamente 2 millones 580 mil personas que laboran en ellas, esto nos confirma la consolidación y repunte de todos los sectores y tamaños de empresas de la ciudad”, enfatizó.
Fadlala Akabani señaló que el primer semestre de 2024 superó en un 16.3 por ciento lo registrado en el mismo periodo de 2023, es decir, 2 mil 300 mdp más, lo que arroja un promedio de crecimiento del 10 por ciento en cada uno de los días festivos y certifica que en la ciudad el comercio, servicios y la propensión al consumo siguen al alza.
Finalmente, la Sedeco invita a la ciudadanía a realizar sus compras para celebrar los siguientes días festivos en lugares establecidos, así como en micro y pequeños negocios locales, con el fin de contribuir a la economía de los Mercados Públicos y negocios ubicados al interior de las calles y colonias en la Ciudad de México.
*** Se vislumbra política monetaria más laxa dice la FED
TOME NOTA *** El gobernador de la Reserva Federal, Christopher Waller, y el presidente de la Reserva Federal de Nueva York, John Williams, describieron un horizonte cada vez más corto hacia una política monetaria más laxa, el primero en un discurso en la Reserva Federal de Kansas City y Williams en una entrevista con el Wall Street Journal.
Los comentarios son los más recientes de una serie realizados esta semana de autoridades de la Fed -incluido su presidente, Jerome Powell- para señalar su mayor confianza en que la tendencia desinflacionista que comenzó el año pasado continúa, a pesar de un breve repunte de la inflación a principios de este año.
Las presiones sobre los precios parecen estar disminuyendo en todos los ámbitos, según funcionarios, con la caída de los precios de los bienes, la ralentización de los aumentos de los costos de la vivienda y un crecimiento salarial más moderado que anticipa una esperada relajación de las alzas de precios en el sector servicios.
Waller, que en mayo había afirmado que necesitaría varios meses más de mejora de los datos sobre inflación para convencerse de que estaría justificado un recorte de las tasas, dijo que la primera caída mensual del índice de precios al consumo en cuatro años comunicada la semana pasada para junio “era el segundo mes de muy buenas noticias”.
Existen tres escenarios posibles para la inflación en los próximos meses. Los dos más probables, dijo, sugieren que la inflación continuará moderándose hacia el objetivo del 2% de la Reserva Federal en los próximos meses, aunque en un escenario la baja es más rápida y consistente que en el otro.
La tercera posibilidad es que la inflación se reacelere y se mantenga en suspenso el recorte de tasas.
Aun así, Waller afirmó que «dado que creo que los dos primeros escenarios tienen la mayor probabilidad de producirse, creo que el momento de bajar la tasa de interés oficial está cada vez más cerca».
Williams, que también es vicepresidente del Comité Federal de Mercado Abierto, encargado de fijar las tasas de interés, afirmó: “Creo que los últimos tres meses -y yo incluiría junio, por lo que hemos visto- parecen acercarnos a la tendencia desinflacionista que buscamos. Me gustaría ver más datos para seguir confiando en que la inflación avanza de forma sostenible hacia nuestro objetivo del 2%. Llevamos unos cuantos meses buenos”.