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CIUDAD DE MÉXICO, 1 de febrero 2018.- El secretario de Estado, Rex Tillerson, inició una gira latinoamericana este jueves “en un momento de precarias relaciones con el vecino del sur de Estados Unidos, con los mexicanos ofendidos por las posiciones de la administración Donald Trump sobre inmigración y comercio, y los diplomáticos del país en una ofensiva total a preservar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN)”, señala el diario The Washington Post.
“El primer año de la administración Trump ha aportado poca claridad a los asuntos más polémicos en la relación bilateral. Varias de las principales promesas de la campaña de Trump aún se ciernen sobre México como una espada colgante: para revisar o posiblemente cancelar el TLCAN, para construir un nuevo muro fronterizo, para deportar a un gran número de inmigrantes no autorizados”, refiere Joshua Partlow, corresponsal en México.
“La relación es crucial para ambas partes. México es el tercer socio comercial de los Estados Unidos, mientras que los Estados Unidos son el socio más grande de México, el destino de aproximadamente el 80 por ciento de sus exportaciones. Los dos países tienen una amplia red de vínculos en temas como la seguridad de la inmigración. Pero las incertidumbres se ciernen sobre las políticas de Trump y sobre la posibilidad de que un líder mexicano menos complaciente pueda emerger de las elecciones presidenciales de julio”, detalla el analista de The Washington Post.
El viaje de una semana de Tillerson, que comienza en México, incluye paradas en Argentina, Colombia, Perú y Jamaica, se enfocará en la crisis en Venezuela según el Departamento de Estado.
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