Se prevé ambiente cálido y cielo despejado en CDMX
CIUDAD DE MÉXICO, 1 de agosto de 2017.- De acuerdo a la información difundida por la Vocería de la Arquidiócesis de México, el padre José Miguel Ángel Machorro arribó a la Ciudad de México para ser atendido en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, sin complicaciones por su traslado en helicóptero.
El Gobierno de Puebla ofreció a los familiares del sacerdote trasladar de emergencia en un helicóptero de la Secretaría de Salud de la entidad para evitar que perdiera la vida, debido a las complicaciones que ha padecido luego de ser apuñalado en el Altar Mayor de la Catedral Metropolitana en mayo pasado.
«Debido a que su vida se encuentra en grave riesgo y es necesario que se recupere de los problemas de desnutrición que presenta para poder posteriormente recibir atención a nivel neuronal, que es donde se encuentra la raíz de las complicaciones de salud que ha registrado últimamente», explicó el vocero de la Arquidiócesis de México, Hugo Valdemar en un comunicado.
«El helicóptero, perteneciente al Gobierno de Puebla, mismo que está asignado a Servicios de Urgencias Médicas Avanzadas, partió a las 10 de la mañana (de este martes) del Hospital General de Tehuacán, y se espera que llegue al Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición alrededor de las 11:30 de la mañana», agregó.
El vocero explicó que gracias a la intervención del cardenal Norberto Rivera Carrera, la Presidencia de la República se ha encargado de dar cauce los trámites para facilitar el ingreso del sacerdote a dicho hospital, a fin de que sea atendido de inmediato y logre salvar la vida.
Personal médico del Hospital General de Tehuacán (Puebla) había informado el sábado pasado que el sacerdote se encontraba sumamente delicado debido a un problema intestinal de carácter infeccioso, lo que provocó inflamación del cuerpo, presión baja y distensión del intestino al punto de la parálisis; además de tener problemas de riñón, producto de las heridas que sufrió el 15 de mayo, al ser víctima de un ataque con arma punzocortante cuando terminaba de oficiar una Misa en la Catedral Metropolitana de México.
En entrevista con Milenio, Hugo Valdermar, vocero de la Arquidiócesis de México informó que luego del traslado fue internado en el hospital de nutrición, sin que se reportara alguna complicación.