El concierto del músico/Rodrigo Aridjis
Prioridades trastocadas
Por: Billie Parker*
El concepto de política tiene muchas acepciones. La política es una actividad orientada en forma ideológica a la toma de decisiones de un grupo para alcanzar sus objetivos, pero, también se define como una manera de ejercer el poder. Algunos la dividen en política de derecha y de izquierda unos para defender el libre mercado y la propiedad privada y la otra para alcanzar la igualdad social.
En esta sintética descripción no se observa todo el debate que se ha creado en torno a las formas en las que se ejerce la política. Obligado remitirse a las dos repúblicas de Platón y Aristóteles. En la primera «La república», Platón planteaba la observación de la realidad como base y la tarea debía estar a cargo de los seres más sabios de sus ciudades Estado. Aristóteles, proponía una visión científica de la política, “donde el análisis social se hiciera tomando en cuenta elementos psicológicos, culturales y sociales para establecer relaciones de causa y efecto. Además, manifestaba la necesidad de crear una clase media que atenuase la brecha existente entre los más ricos y los más pobres”.
Lo cierto es que sea una actividad de quienes procuran obtener el poder, retenerlo o ejercitarlo, con vistas a sus intereses personales, de grupo, o los que tienen la intención de solventar la pugna entre los intereses en oposición que se originan en una sociedad en favor de un bien común, claro y cierto, la vida de los gobernados debe ser resguardada y respetada. Si bien la política es tan antigua como la propia humanidad y es una faena dirigida al bien común, la pregunta es, ¿En qué lugar queda la vida humana en la actividad política que despliegan los gobernantes? Qué es primero, ¿La vida de los gobernados o el ejercicio de la política de un solo hombre, que pretende su propia República sacrificándolos literalmente?
Cuando reinicié esta columna hace dos años denuncié como las omisiones de la política priista, dedicada a fabricar multimillonarios, afectaban a la gente por su manejo en el sector salud, dejando morir a niños, enfermos terminales y con enfermedades crónico degenerativos. En el 2019, yendo contra todos sus derechos y traicioneramente, les vuelven a negar consultas, medicamentos, el seguimiento a su condición, el trato digno que merecen.
El rechazo a las múltiples determinaciones adoptadas en nombre de la 4t, no es por AMLO, es porque se van con todo contra los más desvalidos.
Quiero pensar que Andrés Manuel López Obrador no sabe lo que está pasando y le han vendido una agenda de prioridades alrevesadas, trastocadas y alteradas, aprovechando su ímpetu por transformar al país y conociendo que el costo marginal de la escondida violación de los derechos humanos es cero. En esta historia solo me remitiré a una de las instituciones de la seguridad social que les quitan la posibilidad de seguir con vida a miles de mexicanos. A esas que impiden el acceso a enfermos, niños y adultos mayores a los medicamentos y consultas. Una violencia institucional que no tiene nombre.
Y lo hago porque son pocos los que alzan la voz por ellos. Día con día les arrebatan la vida dejándolos en la indefensión y se configura un delito de lesa humanidad que hay que documentar. Hay que contabilizar cuántas son las víctimas mortales de semejante aberración, que exhibe indolencia y desprecio por ese segmento poblacional, que no tiene con que defenderse cuando los dejan sin consulta (o las aplazan y aplazan) para dejar sin tratamientos a los enfermos.
Deje me explico. Antes de que entrara la cuarta transformación, los derechohabientes al salir de su consulta, la siempre amable señorita, o a veces -seamos francos- no tan amable, les programaba su cita y con ello daba la certeza de que en un mes estaría recibiendo los medicamentos que necesitarían para subsistir. Hoy en día, la dinámica cambió y con ello les despojaron de medicinas y consultas a tiempo. Desde que llegó la cuarta transformación al poder del IMSS son obligados a pagar un ciber espacio para obtener la subsecuente consulta.
Y he aquí el conflicto social. Quienes tienen conocimiento, fuerza vital y una computadora al alcance logran, no sin dificultad, que les asigne una fecha de consulta para obtener la receta para sus siguientes medicamentos. Pero en este esquema nadie pensó en los adultos mayores o enfermos sin movilidad, que apenas les alcanza su salario para comer, que incluso algunos no caminan, o los pacientes que están solos e impedidos.
Además de gastar en el transporte para ir al ciber, por lo menos 16 veces al mes, tienen que buscar cómo pagar las medicinas que el IMSS no les otorga oportunamente para su tratamiento por no tener acceso a la consulta, sin contar con el desabasto. Están en el más irrazonable exterminio de esa población vulnerable al poner en riesgo sus vidas y negarles sus derechos. Es decir, la dinámica de conseguir la cita por internet, QUE NO TIENEN las personas más vulnerables en su casa, afecta a los más desamparados.
Los Poderes Ejecutivo y Legislativo que están obligados a fortalecer al sistema de salud para que sea una alternativa pública para gran parte de la ciudadanía que no tiene acceso a los servicios privados, son omisos ante esta realidad.
Raquel Buenrostro Sánchez, Oficial Mayor de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, reconoció ante senadores que se han realizado cambios importantes en la compra de medicamentos, que es una de las variables para explicar la negligencia institucional del IMSS.
En el tema del desabasto anunció que estiman “salir con un proceso de licitación para el segundo semestre del año”. ¿Y? supongo que la lógica de esta nueva clase política es que mientras tanto se mueran los enfermos, o ¿cómo explicar esta violación a DH de los pacientes?
Los mediáticamente bien organizados enfermos de VIH/SIDA, cerraron avenida Reforma, ventilaron su situación cuando la SSA les quitó los antirretrovirales. Fue tal la viralización de su situación que hasta la ONU entró al quite al ofrecer su ayuda a Andrés Manuel López Obrador para que cumpla con su obligada tarea de atención a la salud. Pero ¿y los demás? Los que en pueblos olvidados no pueden conseguir una consulta ¿Qué debe hacer? Aguantarse, quebrar su tratamiento, extinguirse física y anímicamente con este tipo de delitos, que como el alcohol son tolerados.
No señores y señoras legisladoras de Morena y funcionarios de la cuarta transformación. Su agenda de prioridades políticas no justifica acabar con vidas humanas. Trasformar a México es cumplir su obligación de preservar la vida de millones de mexicanas y mexicanos en situación de vulnerabilidad, mientras eliminan la corrupción. Sus prioridades a 5 meses de gobierno están trastocadas.
*Dir. BillieParkerNoticias.com