Cerramos la etapa del institucionalismo neoliberal, considera Monreal
CIUDAD DE MÉXICO, 9 de julio de 2020. — El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador regresa de Estados Unidos con las manos vacías sin nada que ofrecerles a las y los mexicanos ya que, por el contrario, las reuniones que sostuvo con su homólogo, Donald Trump, solo sirvieron al mandatario estadounidense para su lucimiento y acercarlo a los votos hispanos para que así pueda lograr su reelección el próximo mes de noviembre, advirtió el dirigente nacional, Ángel Ávila Romero.
Calificó el encuentro, como una reunión “vacía y sin contenido, que sólo fue utilizado como un acto de campaña a favor del presidente de los Estados Unidos, un mandatario racista y anti mexicano que en ningún momento ha fomentado el respeto hacía nuestros connacionales y por contrario ha promovido el odio”.
Subrayó que solo fue una simulación, pues en dichas reuniones a las que también acudieron empresarios mexicanos, “no se logró absolutamente nada, el T- MEC se había firmado desde el anterior gobierno, ya que éste solo fue la actualización del Tratado de Libre Comercio, el cual se concretó a pesar de todos los obstáculos que planteó Donald Trump. Por eso creemos que esta reunión sólo sirvió como punto de apoyo para la campaña del mandatario estadounidense”.
Además, dijo, que entre los empresarios no se tomó en cuenta a los que sí tendrían temas sustanciales para tratar con el gabinete comercial de EEUU, como nuestros productores de tomate o aguacate, empresarios cementeros o relacionados con el sector automotriz y el sector energético fundamentales para el T-MEC.
En este contexto, el dirigente nacional insistió que el encuentro fue muy tibio al no abordar ni analizar la grave problemática que enfrenta México en materia migratoria y de relaciones comerciales con el país del norte.
Indicó que el mensaje que dio el mandatario mexicano en la Casa Blanca estuvo lleno de elogios hacia el gobierno estadounidense y, contrariamente a la realidad, destacó que el discurso de Trump fomenta el respeto hacia los mexicanos, olvidando por completo las declaraciones xenofóbicas y racistas que lanzó el gobernante latinoamericano hace unos meses al calificar a los mexicanos como violadores, criminales y traficantes de drogas.
Ávila Romero criticó que López Obrador siga hablando de una realidad distinta a la que enfrenta México, “cuando es evidente que Trump odia a los mexicanos y que solo busca su beneficio personal y no quitará el dedo del renglón para continuar con la construcción del Muro y que éste sea pagado por nuestro país”, concluyó.