Cerramos la etapa del institucionalismo neoliberal, considera Monreal
CIUDAD DE MÉXICO, 3 de marzo de 2016.- Debido a que el desarrollo democrático del país está en crisis y no le es útil a la población pese a la gran cantidad de trabajo y dinero invertido, el diputado Omar Ortega Álvarez propuso reformar la Constitución para instituir nuevos modelos de comunicación durante las campañas político–electorales, informó el Grupo Parlamentario del PRD a través de un comunicado.
Señaló que, tal como está la normatividad sobre los esquemas de comunicación política de partidos y candidatos actualmente, se contribuye, con otros factores, a desalentar la auténtica participación ciudadana en los comicios porque da lugar a la saturación y frivolización de mensajes a través de los llamados spots.
Mediante una iniciativa de reforma al artículo 41 de la Constitución, planteó la necesidad de sustituir éstos por otro tipo de mensajes que, aun cuando sean breves, ayuden al desarrollo de la cultura democrática con base en producciones de mayor calidad en cuanto a formato y contenido.
Se trata –dijo– de privilegiar la difusión de propuestas fundamentales de las y los candidatos más que las imágenes, frases y tonadas superficiales.
La propuesta de Ortega Álvarez busca modificar específicamente los incisos “a” y “b” del apartado A, contenido en el numeral III del mencionado artículo 41 constitucional, con lo cual se busca que la cantidad y frecuencia de mensajes en campañas y precampañas de partidos y candidatos disminuyan, pero simultáneamente se eleve su calidad, contenido y profundidad.
“Los ciudadanos, sin duda, agradecerán esta medida y pondrán más atención a este esquema de comunicación, ya que bajará la saturación de mensajes que los hace rechazar y alejarse de las campañas, pues aumentará la calidad y contenido sobre las propuestas de partidos y candidatos”, subrayó el diputado perredista.
Consideró que, de mantenerse el actual modelo al lado de una creciente desigualdad social, inseguridad, desempleo y falta de oportunidades, la crisis del desarrollo democrático nacional se ahondará porque continuará desalentándose la auténtica participación ciudadana.
No será de otro modo –advirtió– si además persisten fraudes, abusos con recursos públicos para compra de clientelas electorales, las promociones electorales disfrazadas de programas sociales y de combate a la pobreza, y la falta de ofertas políticas atractivas.
Aclaró que no es con reformas encaminadas contra algún dirigente, partido político o candidato independiente como avanzará la democracia mexicana, pero tampoco con una regresión a viejos esquemas de oficialismo, autoritarismo y pago de campañas con recursos públicos para lucro de las grandes televisoras.
“Recordemos cómo durante las campañas políticas del siglo pasado y hasta mediados de la última década había gran cobertura para candidatos oficiales y una pírrica y hasta ridícula cobertura para los candidatos opositores”, señaló.
Enfatizó que así como la presión ciudadana y la oposición política lograron la evolución del marco jurídico electoral hasta lograr la pluralización en medios de comunicación, ahora el concurso de las fuerzas políticas en el Congreso puede lograr una profundización de la cultura política nacional con esta reforma.