Buscará Ortega a estudiantes de Ayotzinapa

MÉXICO, DF, 30 de abril de 2015.- El gobernador de Guerrero, Rogelio Ortega Martínez, aseguró que el estado se encuentra en relativa calma, “ya salió de terapia intensiva y ahora está en cuidados especiales”, por lo que de manera categórica garantizó que el proceso electoral se llevará a cabo. Entrevistado tras su reunión de trabajo con la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados, el mandatario estatal afirmó que son más los que en Guerrero quieren elecciones y anticipó que ya se organiza un operativo especial en los lugares que representan “focos rojos” con el propósito de impedir que alguien se atreva a negarles el derecho libre a votar. Aunque admitió que hay un sector de grupos de la delincuencia organizada que tienen su presencia en Guerrero, confió en que no irrumpirán en el boicot del proceso electoral, al igual que los familiares de los 43 estudiantes normalistas desparecidos, de lo contrario, advirtió, el gobierno actuará. Rechazó que la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (CETEG) ni nadie tiene de rodillas al estado, pues arguyó que a su llegada al frente de la gubernatura, había 46 ayuntamientos tomados e iban por los 81 municipios. “Ahora quedan menos de cinco. Prácticamente, Chilpancingo, ya en ruta de que nos lo entreguen; Tixtla porque, por supuesto, ahí está Ayotzinapa, es el emblemático, y Tlapa”, dijo a pregunta expresa de Quadratín México. Recalcó que votar es un derecho consagrado y no está a debate ni a discusión, por tanto nadie, por legítimo que sea su reclamo, puede impedir a un mexicano o guerrerense su derecho a sufragar. Admitió que en la entidad guerrerense es claro que hay una herida que no cierra y a partir de la demanda de los padres de los normalistas se debe retomar el asunto pero entre autoridades y los agraviados, a fin de llegar a una ruta de encuentro institucional y solución al tema. Pese a asegurar la relativa calma en el estado, Rogelio Ortega refirió que “cualquier vientecito puede avivar las brasas que ahí están incandescentes”, en alusión a los últimos ataques al edificio del Congreso local y oficinas públicas. Por ello, su gobierno le apuesta al diálogo, tolerancia, mesura, sensatez y a los acuerdos positivos para ganar la confianza de los liderazgos de que juntos se pueden resolver los conflictos.