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MÉXICO, DF, 17 de noviembre de 2015.- La Policía Federal logró la captura de cuatro sujetos presuntamente relacionados con el grupo criminal que secuestró y privó de la vida a dos empresarios restauranteros, padre e hijo, en el municipio de Pueblo Viejo, en el norte del estado de Veracruz.
En seguimiento a la investigación sobre el secuestro y homicidio de dos empresarios, cometido en septiembre pasado, la información que se obtuvo permitió ubicar los sitios donde pretendían ocultarse otros de los presuntos responsables, informó el Comisionado Nacional de Seguridad, Renato Sales Heredia.
En el marco de la Estrategia Nacional Antisecuestro, el titular de la CNS detalló que derivado del trabajo de inteligencia e investigación, suman diez los presuntos responsables del secuestro y homicidio de los empresarios veracruzanos que serán sometidos a proceso penal, “con el compromiso de las autoridades de que este crimen no quede impune”, aseguró Sales Heredia.
En Monterrey, fue detenido asimismo quien dijo llamarse Silvestre Mar González, de 25 años de edad, a quien se le aseguró un arma larga abastecida y se presume encabezaba varios grupos dedicados principalmente al secuestro de migrantes, extorsión y asalto a comerciantes y transportistas en los municipios de Tampico y Altamira en Tamaulipas, además de Pueblo Viejo, en Veracruz.
En la ciudad de México, se logró la captura de Armando Martín Balderas, de 50 años de edad, en las inmediaciones del domicilio de unos familiares, en el que se ocultaba desde hace una semana.
Este sujeto, destituido como comandante de la Policía Municipal de Pueblo Viejo, enfrentó proceso penal por la portación ilegal de un arma larga y una granada, presumiblemente encabezaba a un grupo de informantes quienes ubicaban a las víctimas posibles, además de que al parecer cooptaba a nuevos integrantes del grupo criminal.
Paralelamente, en el municipio de Tampico se detuvo a Juan Manuel Burgos Ponce y a José Armando Guerrero Olmedo, de 21 años, quienes se presume participaban como negociadores con los familiares de las víctimas, además de que también fungían como los que repartían el dinero producto de los secuestros y extorsiones.
La Policía Federal implementó un operativo simultáneo en tres entidades del país Nuevo León, Tamaulipas y el Distrito Federal.