Cerramos la etapa del institucionalismo neoliberal, considera Monreal
MÉXICO, DF, 26 de abril de 2015.- Diputados de la Agrupación Morena insisten en su derecho a ser tomados en cuenta en la integración de la Comisión Permanente, órgano que suple a las Cámaras del Congreso de la Unión en sus recesos, ante la próxima clausura de los períodos ordinarios de sesiones.
Manuel Huerta Ladrón de Guevara, vicecoordinador de la fracción adscrita al partido de Andrés Manuel López Obrador, insiste con argumentos establecidos en la Ley, que les asiste plenamente su derecho a participar de forma activa y no pasiva en la siguiente Comisión Permanente de la 62 Legislatura.
El ex petista y ahora morenista anticipó la negación de la petición que formulada por escrito desde el pasado 9 de abril ante la Junta de Coordinación Política, para que los legisladores de su agrupación formen parte del órgano que suple a ambas Cámaras.
En atención a que en la Constitución no se habla de grupos parlamentarios”, Huerta Ladrón de Guevara arguyó que el artículo 78 establece que durante los recesos del Congreso de la Unión habrá una Comisión Permanente integrada por sus respectivas Cámaras en la víspera de la clausura de los períodos ordinarios de sesiones.
La Comisión Permanente está compuesta por 37 miembros, de los cuales 19 son diputados y 18 senadores, por ello el diputado indicó que no puede oponerse a ello “la consideración de que Morena, en virtud de no ser Grupo Parlamentario, no tiene derecho a tener representación activa” en el órgano.
“Morena ha dado muestras de que es un actor legislativo responsable, que ha contribuido en forma crítica y constructiva frente a una 62 Legislatura, caracterizada por aprobar sin más cuanta reforma proviene del Ejecutivo”, señaló.
“Mal harían las mayorías dominantes en la Jucopo en bloquear la participación de esta agrupación política. La democracia es la discusión de verdades distintas, y es precisamente por esta razón que los órganos parlamentarios deben ser plurales e incluyentes, estar abiertos a la discusión civilizada, por ríspida que sea, ya que de lo contrario se violenta el texto y el espíritu de la Constitución”, discurrió.