Discrepan gobiernos federal y capitalino por ajuste a salario mínimo

MÉXICO, D.F., 5 de agosto del 2014.- El subsecretario federal de la Secretaría del Trabajo, Rafael Avante Juárez, fue tajante desde el primer minuto, en torno a la propuesta de aumentar el salario mínimo en todo el país: “No debemos confundir un simple incremento de ingresos, con el verdadero poder adquisitivo de esos ingresos”.

Durante el acto inaugural del Foro Internacional: Salarios Mínimos, Empleo, Desigualdad y Crecimiento Económico, organizado por el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, llamó la atención la ausencia del invitado de honor de este encuentro, el secretario del Trabajo federal, Alfonso Navarrete, de quien, según se justificó, se encuentra en Argentina por cuestiones de trabajo.

Rafael Avante, con voz enfática, y la probable consigna de dejar muy en claro la postura del Gobierno federal en torno a la posibilidad de subir el salario mínimo, pidió a los presentes pensar en los índices inflacionarios.

“Grandes e importantes experiencias hemos tenido cuando no tomamos las variantes económicas, y simplemente suponemos que ganar más pesos, significa que esos pesos alcanzarán para más, pero si afectamos las variables económicas y los índices inflacionarios, es evidente que el valor real de esos pesos se ve seriamente deteriorado y en ocasiones terminamos afectando el poder adquisitivo que queríamos estimular”.

En uno de los salones del Museo Nacional de Antropología, y ante la presencia del jefe de Gobierno Miguel Ángel Mancera, el rector de la UNAM, José Narro, el representante de la CEPAL en México, Antonio Prado, y distintos secretarios del Gobierno del Distrito federal, el representante del Gobierno Federal pidió a los presentes “prudencia y cuidado en analizar este tema”, así como el evitar politizar un tema tan serio como lo es, dijo, el salario mínimo.

“No es dable ni permisible que nadie, pretenda capitalizar electoralmente un tema tan importante para los mexicanos ni hacer del ingreso de los mexicanos una bandera política. No es un asunto de factores políticos, es un asunto de factores de la producción. No es un asunto de popularidad en encuestas electorales, es un asunto de variables económicas concretas”.

Mancera durante su intervención, explicó que el motivo principal de este foro internacional sobre el salario mínimo es analizar con expertos, “sobre el ingreso de los que menos tienen”, y hablar sobre un rezago con más de tres décadas.

“Reconocer este problema: un rezago de 35 años en los salarios, en especial el salario mínimo, nos ha llevado a una pérdida que con las cifras nos muestra el 77 por ciento de poder adquisitivo, y significa que en la ciudad de México sólo podríamos adquirir el 23 por ciento de lo que se podría comprar en los años 70″.

En ese sentido recordó que fue durante 2013, cuando su gabinete se percató que a través de variables económicas, se logró una mejoría en materia de empleo en la capital del país.

“Habíamos producido más o menos el 30 por ciento de empleo del país, estábamos cumpliendo con una meta conjunta con otros estados y que con el Gobierno federal se había trazado”.

Sin embargo, se percataron, dijo, de la poca compensación en los empleos generados. Habíamos logrado un “30 por ciento de mayor generación de empleo, pero empleos que mostraban ingresos bajos”.

Finalmente Mancera enumeró los cinco puntos de ruta que se ha trazado el Gobierno del Distrito Federal, en este camino por impulsar una mejora en el salario mínimo, y que de acuerdo con la declaración hecha la semana pasada por el secretario de Desarrollo Económico, Salomón Chertorivski, podría oscilar entre los 87 y 100 pesos, quedaría de la siguiente manera.

El primer punto ha sido el convocar a un debate nacional, a través de este foro internacional. Posteriormente, expuso, se elaborará a través del gabinete económico capitalino “una propuesta de política de recuperación” del salario mínimo.

“Tres, conformar un grupo de especialistas, para apoyar la elaboración de un documento, y que señale cuál es la ruta, el camino las evidencias, los efectos y constituya una base de política salarial. (…) Y una vez escuchados de esos planteamientos participar de una propuesta, que espero y confío sea una propuesta nacional”, explicó.