Pide asambleísta del PAN estudios de movilidad para nuevo aeropuerto

MÉXICO, DF., 8 de septiembre de 2014.- El proyecto del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM), carece de estudios de movilidad, aseguró la presidenta de la Comisión de Movilidad de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), Laura Ballesteros Mancilla.

El anuncio del gobierno federal sobre las obras de infraestructura de 190 kilómetros de vías para que circulen más autos, contra menos de 50 kilómetros de vías para peatones, muestra que la movilidad no es una prioridad.

«Justamente ante este proyecto tenemos que hacernos la pregunta de en qué momento los tomadores de decisiones, los presidentes de la República consideraron que era más importante darle espacio a los automotores que a las personas y es ahí donde tenemos la posibilidad de cambiar», se cuestionó.

En el proyecto del NAICM, presentado la semana pasada, se incluyeron estudios normativos, de impacto ambiental y geotécnicos, entre otros, pero ninguno de movilidad, añadió la legisladora panista.

«Estas 12 obras que anunció el gobierno federal para el nuevo aeropuerto, para nada contribuyen a la nueva visión de la ciudad de México, marcada por la nueva ley de movilidad», consideró Ballesteros.

Tampoco hubo anuncios de más líneas del Metro, sólo de ampliación de las líneas actuales.

“Parece que ya les dio miedo con lo que pasó con la Línea 12”, ironizó.

En caso de no realizar estudios de movilidad, y apostar por el uso del automóvil para llegar a la nueva obra, el NAICM puede quedar como una de primer mundo, pero con una ciudad del tercero, advirtió.

Pidió que los accesos al nuevo aeropuerto no vayan a ser por segundos y hasta terceros pisos, porque de ser así, en seis años la ciudad podría llegar a tener 12 millones de autos.

“La pregunta es dónde los vamos a colocar, a estacionar y lo más delicado, qué vamos a respirar en la ciudad de México”.

Pide mesa de alto nivel para el DF

Adelantó que por ello pedirá un punto de acuerdo para establecer una mesa de alto nivel entre el gobierno capitalino y el federal, tal como ocurre en el caso del Estado de México.

Con ello incluso se difuminarían las sospechas de que con el megaproyecto se beneficia más al Estado de México.

“Las sospechas nacen de esta mesa de alto nivel que se genera en el Estado de México y que no se ha creado en el DF”, dijo.

La mesa es necesaria porque las obras tendrán repercusiones en la ciudad los próximos 40 años, no sólo en este sexenio, indicó.

“No vayamos a pensar que el presidente Enrique Peña Nieto sólo trabaja para el Estado de México y no para el DF, donde nos van a dejar sus obras viales”, finalizó.