Denuncia oposición que Morena legisla por medio de fe de erratas
CIUDAD DE MÉXICO, 17 de febrero de 2016.- Frente a la crisis que enfrenta el sistema penitenciario del país, el secretario de la Comisión de Gobernación en la Cámara de Diputados, Rafael Hernández Soriano, considera necesario la comparecencia del secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, y el comisionado Nacional de Seguridad, Renato Sales Heredia.
Hechos como la segunda fuga de Joaquín Guzmán Loera, El Chapo, la muerte de 49 reos en la prisión de Topo Chico y el reciente motín en la cárcel de Ciudad Victoria, son el reflejo de lo que se vive en el interior de los casi 400 penales de la República, señaló el legislador del PRD.
Luego de que el propio Renato Sales reconociera que existe autogobierno impuesto por grupos delictivos en más del 70 por ciento de las prisiones, Hernández Soriano, pidió que los responsables atender los asuntos de seguridad nacional acudan ante el Congreso a exponer las acciones que realizan por la crisis que enfrenta el sistema penitenciario.
“Es urgente que se dé una respuesta contundente y comprometida de los Poderes de la Unión para evitar más tragedias humanas y frenar el deterioro de las instituciones ante el reto que plantea esta crisis penitenciaria”, exigió el perredista.
El más reciente Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria elaborado por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, arrojó que en las prisiones predomina la sobrepoblación, el hacinamiento y el autogobierno.
Según el principal objetivo de las prisiones debe ser la reinserción social del sentenciado para que no vuelva a delinquir, sin embargo se ha comprobado que personas procesadas por delitos menores y mezclados con internos de alta peligrosidad, facilita a aprender otros ilícitos elevando la reincidencia.
Hernández Soriano difirió de los dichos del Comisionado Nacional de Seguridad en el sentido de que los penales federales no viven una situación de crisis como los estatales, y recordó que la problemática penitenciaria afecta a todo el país, máxime que en la práctica conviven presos por delitos federales y del fuero común.