Responsabilidad civil: gran deficiencia en cultura financiera mexicana

MÉXICO, DF, 17 de febrero de 2015.- El término ‘responsabilidad civil’ es un tanto nebuloso para las personas comunes y corrientes. La gente lo reconoce como un concepto que aparece en los seguros de automóviles, sin embargo, la mayoría de los mexicanos desconocen que abarca muchos más rubros de su vida personal y profesional y que incurrir en una responsabilidad de este tipo, puede arruinar una carrera y un patrimonio.

Quadratín México acudió a GMX Seguros, la aseguradora líder en este ramo según estadísticas de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros, AMIS, para conocer más sobre esta cobertura y reconocer su importancia, como parte de la educación financiera de nuestro país.

“Según estas cifras que son oficiales para la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas, CNSF,”, explica Raúl Tapia, director de Desarrollo de Negocios de la compañía, “al 31 de diciembre del 2014, GMX Seguros es la compañía con mayor participación en el ramo de responsabilidad civil en el mercado mexicano y la quinta en el segmento de daños sin autos.

“Somos una empresa con capital 100 por ciento mexicano, que pertenece a un grupo de cuatro aseguradoras que conforman nuestro consorcio, denominado Grupo Valore y a partir del 2 de marzo nos mudamos de instalaciones a un corporativo situado en la colonia Chimalistac”.

¿Qué es una responsabilidad civil?

De acuerdo al Código Civil, cualquier persona que cause daño a otra, ya sea en su persona o en sus bienes, está obligada a repararlo, esta situación es conocida como responsabilidad civil, de la cual, esta compañía de seguros es la única especializada en el mercado, desde su nacimiento en 1998.

Sin embargo, en percepción del entrevistado, tanto el mercado asegurador, como los posibles clientes no visualizan la importancia de proteger o estar protegidos en este rubro.

“Iniciamos haciendo ruido en este ramo, cuando a nadie le importaba. Pero en los últimos dos años ha habido una gran competencia, por el interés mucho mayor que tienen otras compañías en participar en este sector y ha crecido muchísimo. Ahora ya es un ramo más importante aunque por mucho no llegamos a los niveles que hay en EU o Europa”, indica y afirma que sin embargo, hay mucho por hacer, pues según su percepción, el mercado virgen es muy amplio todavía.

“El mercado mexicano tiene un potencial de crecimiento enorme. Pero la competencia está dada porque hay mucho que asegurar que nadie ha tomado aún, porque nadie se ha atrevido y  GMX Seguros se  ha preocupado por identificar esas necesidades específicas de cobertura.Este éxito le ha resultado atractivo a muchas empresas de seguros, incluso extranjeras, pero hay un problema de falta de imaginación, porque nos estamos peleando por ‘las mismas toronjas’. Cuando nosotros abrimos una nueva oportunidad y la explotamos, pasan años o meses y el mercado viene por esos mismos negocios”, lamenta el asegurador.

Esta situación además genera que la competencia por obtener un negocio sea a través del precio, el cual tiende a bajar sistemáticamente, con tal de obtener a un cliente, aun sin respetar los cálculos actuariales sobre los que se establece el costo. Esta situación, a una gran escala, podría provocar incapacidad de las compañías para hacer frente a sus responsabilidades.

Cultura financiera deficiente

Esta falta de penetración en el mercado mexicano, por parte de las compañías de seguros, así como la percepción de los posibles consumidores sobre la adquisición de uno de estos productos también impiden su crecimiento y lo que es peor, los mantienen expuestos.

“Es un tema que tiene que ver con temas de educación y en nuestro país es muy escasa. Por eso tenemos que hacer un esfuerzo enorme por hacerles ver que el seguro no es algo que se tiene que comprar a fuerza, sino que se convenzan de comprarlo porque están expuestos a un riesgo y en caso de que se materialice, les puede golpear severamente en el patrimonio”, dice el funcionario.

“Además con los cambios en la Ley Federal del Trabajo y que el daño moral en muchos estados se calcula a consideración de los jueces, hemos tenido casos en que las indemnizaciones fueron alarmantemente altas para lo que se acostumbraba en México. Hoy la valoración por muerte es de cerca de 4 millones de pesos, por ejemplo”, advierte.

“La gente no contrata más seguros de responsabilidad civil, porque a lo mejor todavía no percibe esta necesidad de tener sumas aseguradas mayores para su coche o en su casa, hablando de las responsabilidades privadas que tenemos como ciudadanos. Pero en cuestiones profesionales puede ser mucho más preocupante: para un médico, un ingeniero.

“Falta mucha educación financiera y es uno de los temas por los que el mercado mexicano no crece porque la gente considera al seguro como algo que no funciona, que es caro y que hay que comprarlo para el coche, porque en términos de frecuencia es el mayor riesgo al que está expuesta una persona”, continúa.

Entonces, agrega, “como sector tenemos que hacer mucha conciencia de invitar a la gente a adquirir un seguro pues al no tenerlo, primero no tendrás quién te defienda y, si hay que indemnizar algo, tendrás que vender todos sus bienes, en caso de tenerlos, para poderle hacer frente a la sanción  y, si no tienes para pagar, lo siguiente es una pena corporal y sabemos de casos que desgraciadamente han terminado así”.