Alfa omega/Jorge Herrera Valenzuela

La vida no es tan rosa ni romántica

• Urgentes la Reconciliación y la Reconstrucción
• Se Fue Uno de los Grandes Políticos PRIistas
• Nieto e Hijo de Tigres, Con Futuro, en Acción

Jorge Herrera Valenzuela

Con el Voto del 2 de Junio de 2024 Desterremos a la Delincuencia Organizada, Volvamos a Vivir en Paz, Que Se Aplique la Ley

Estamos viviendo una época de cambios, no de transformación.

Me gustaría mucho, por el bien de las futuras generaciones y quienes queremos vivir unos años más, que los mexicanos nos sacudiéramos el polvo de la indiferencia frente a las elecciones del 2024, termináramos con la injustificada apatía cívica y demostremos con hechos el interés de progresar. Reiteremos  nuestra inconformidad por un gobierno unipersonal.

Hay que trabajar arduamente por la Reconciliación de los mexicanos. Todos debemos obligarnos a aportar esfuerzos para la Reconstrucción  de México.

Por primera vez, una mujer despachará como Presidenta de los Estados Unidos Mexicanos, a partir del 1 de octubre de 2024. Cruzará la Puerta de Honor de Palacio Nacional, en automóvil.

Nada fácil es el trabajo que espera al nuevo equipo para las tareas políticas y administrativas.  Al interior la violencia y la inseguridad son los problemas prioritarios. Serio enfrentamiento habrá de darse contra la delincuencia organizada, la desorganizada y el narcopoder.

Cuando me preguntan, ¿Por quién vas a votar?

La respuesta se encierra en dos palabras, Por México.

La que gane en las urnas debe tener el respaldo de los millones de mexicanos, hayamos votado en pro o en contra de la  candidata triunfadora. Será de nuestro respeto a la institucionalidad que representa como Jefa de Estado.

Ella debe tener todo  nuestro respeto y apoyo a su investidura.

Ya no estamos en tiempos de más divisionismo. Que se termine con la negligente política solapadora de los delincuentes “porque también son humanos” y la absurda postura de “abrazos no balazos”. Aplicar la Ley y punto.

Reconciliar  a los mexicanos, es muy importante. No sólo en la vida pública, política, social, cultural y deportiva, sino en las mismas familias. Hermanos contra hermanos. Padres contra hijos. Borrar la mancha aplicada a la clase media, porque no comulga con las ideas gubernamentales.

Hay que presentar programas de soluciones. Realizables. Ejecutables. No esperar más.

El militarismo impuesto no debe permanecer, porque el Ejército Mexicano tiene tareas, funciones y obligaciones constitucionales más importantes que las otorgadas.

La verdad es muy bonita la vida rosa, hasta una canción hay. El romanticismo ha imperado siempre entre los humanos. Sin embargo en el incipiente Siglo XXI hay muchos cambios, cero transformaciones.

ADIÓS A TULIO HERNÁNDEZ

Es muy triste morir fuera de tiempo. Dejar de respirar casi en el abandono. Si acaso algún familiar está para cerrarle los párpados.

¿Dónde están los “amigos” y los que gozaron de los beneficios del que emprendió el viaje sin regreso?

Se preguntará porqué estoy melodramático o qué araña me picó.

Ha muerto mi compañero preparatoriano e hijo de un Consejero de la Juventud, el profesor Francisco Hernández y Hernández y de la profesora Leonarda Gómez Blanco. Tuvo dos hermanos Pancho y Héctor. El primero ya falleció.

El pasado día  16 en una vivienda de San Esteban Tizatlán, en la capital de Tlaxcala, murió Tulio Hernández Gómez, a los 85 años. Me dijeron: “Estaba solo. Vivía con sus dos leales servidores. Su secretaria y su secretario particular”. Es uno de los iconos tlaxcaltecas. En su tierra dicen que su mejor legado, la herencia más sentida, es “Amar a Tlaxcala”.

La noticia entristeció a quienes lo conocimos y atestiguamos su valor como político, de los grandes del siglo pasado. Con la camiseta tricolor, la del PRI, desde los años en que fue directivo juvenil en Tlaxcala y en el Distrito Federal. Un joven eficiente secretario particular de otro grande, el gobernador Emilio Sánchez Piedras, a quien llamaron “El Príncipe de Tepetzala”.

Tulio pertenece a una brillante generación de políticos PRIistas. El 19 de marzo de 1959 asumió la subdirección nacional juvenil. El titular fue el profesor Miguel Osorio Marbán. Dos subdirectores más, Pedro Luis Bartilotti Perea y Daniel Miranda Molina. El Presidente de la Comisión Editorial, Augusto Gómez Villanueva.

En esa camada política, en el sexenio de Adolfo López Mateos (el pasado viernes 22, se cumplieron  59 años de su fallecimiento), también estuvieron Carlos Armando Biebrich, Guillermo Fonseca Álvarez, Luis H. Ducoing, gobernadores de Sonora, San Luis Potosí y Guanajuato, respectivamente. Alfredo Figueroa, presidente municipal de Taxco, Guerrero. Biebrich Torres murió en 2011 por Covid 19.

De esa Dirección Nacional Juvenil salieron gobernadores, senadores, diputados federales y locales, presidentes municipales y miembros de gabinete presidencial, como Osorio Marbán y Gómez Villanueva, ambos en la Secretaría de la Reforma Agraria en diferentes períodos. Funcionó el Instituto Nacional de Capacitación Política con la guía del presidente del CEN del PRI, general y licenciad Alfonso Corona del Rosal.

LO RECUERDAN CON CARIÑO

A Tulio lo quieren sus paisanos. Fue un gobernador que siempre estuvo al lado del pueblo.

“Don Tulio siempre me recibió y daba respuesta a los problemas que le planteábamos”, me dijo un campesino de Huamantla en una reciente visita, con motivos de las fiestas taurinas del pasado agosto.

Los tlaxcaltecas vivieron seis años, a partir del 15 de enero de 1981, en pleno desarrollo agropecuario. Se mantuvo la paz política y social. Se promovió la creación del Instituto Tlaxcalteca de Cultura y el Fidecomiso de la Casas de las Artesanías. Se publicaron los Códices de Huamantla y de Tepectipac, así como los Lienzos de Tlaxcala y de Huamantla. Los Colegios de Bachilleres con diferentes especialidades y fu modernizado el Instituto Tecnológico de Apizaco.

Como está comentado, Tulio asumió en enero de 1981, la gubernatura, misma que le entregaba su exjefe, Emilio Sánchez Piedras y a su vez Tulio cedió el paso a la gran política Beatriz Elena Paredes Rangel. Un trío de políticos y gobernadores hasta ahora no superado.

La gran noticia en los medios político y artístico se produjo en 1982 cuando el gobernador Tulio Hernández contraía matrimonio con la superactriz y superbella Silvia Pinal, quien se convirtió en Primera Dama de Tlaxcala y directora del DIF.

Silvia por su labor recibió buenos comentarios y cumplió con su misión en esa institución para atender los problemas de la niñez y de la familia.

El matrimonio Hernández Pinal duró 13 años. Tulio se dedicó a la docencia en la Facultad de Derecho de la UNAM y en la Escuela Nacional Preparatoria. El Alzheimer y problemas cardíacos le cortaron la vida. En su partido político no tuvieron para pagar la inserción, en diario,  de una esquela.

HOMENAJE PÓSTUMO

La gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros preparó y realizó en el Palacio de Gobierno, un merecido homenaje a Tulio Hernández. El evento se caracterizó porque acudieron muchos tlaxcaltecas que, en verdad apreciaron al gobernador impulsor de la cultura y quien en febrero de este mismo donó el casco del exrancho Santo Domingo, en Calpulalpan, para que en  el espacio sea edificado el Museo Regional en una de las zonas arqueológicas de Tlaxcala.

Durante la ceremonia, de cuerpo presente y frente al ataúd, el Secretario de Educación, Antonio Martínez Velázquez dio lectura a la semblanza de Tulio Hernández Gómez, resaltando que fue un honesto y auténtico líder social y político, al que siempre recordarán.

Uno de los pocos comentarios que leí fue el de mi amigo y colega Teodoro Rentería Arroyave. Ni hablar, así es la vida o más bien así actuamos los humanos, indiferentes y olvidadizos.

Doña Silvia Pinal, ahora retirada del espectáculo, ya divorciada de Tulio inició su carrera política fue Diputada federal, Diputada local en el Distrito Federal y Senadora por dos años.

ES GARCÍA Y PUBLICITAN A HARFUCH

La verdad no entiendo nada de política sexenal. No me preocupa ni quiero entender, porque es simplemente etapa de ocurrencias, de caprichos y de lo que importa es tener el poder.

Omar Hadim García Harfuch, excelente funcionario en materia de seguridad, había manifestado que no entraría al juego para ser aspirante al Gobierno de la Ciudad de México. De pronto lo animaron, seguramente lo meditó y finalmente hizo pública su participación con el apoyo del partido político en el poder.

García Harfuch es el único elemento del gobierno que tiene 10 de calificación. La Ciudad de México tiene problemas con los narcomenudistas, pero no es escenario de pleito entre los Carteles de Sinaloa, Jalisco Nueva Generación y del Golfo, entre otros. “Los Chapitos” perdieron a sus células, al ser capturados sus sicarios en un operativo realizado en Topilejo, Alcaldía de Tlalpan.

Los delineantes de “El Mencho”, los del Cartel Jalisco Nueva Generación, intentaron asesinar a Omar. Lo hirieron de tres y salvó la vida. Identificados los sicarios y ordenadas las aprehensiones. Aquí no se aplicó la orden presidencial de “Abrazos no Balazos”.

Comento que no entiendo lo del nombramiento del hombre que está preparado para ser, como ya lo es, un efectivo combatiente de la delincuencia, la llamen organizada o desorganizada.

El Presidente de México no lo traga ni en pintura. En los dos casos sobresalientes mencionados, de Palacio Nacional salieron instrucciones a la Fiscalía de la Ciudad de México para que sean benignos con los detenidos en Topilejo y silencio con los de “Mencho”.

¿Se impuso la doctora Claudia Sheinbaum Pardo?

 ¿Omar estará corto tiempo en el cargo y después será Fiscal General de la República o Secretario de Seguridad Ciudadana?

Omar García Harfuch debe realizar una campaña político electoral sin que solo se le identifique por el apellido HARFUCH.

Muy respetable su apellido materno. Su mamá es mi artista consentida y me fascina verla con Cantinflas en El Barrendero, María Sorté. María Harfuch Hidalgo, nacida en Ciudad Camargo, Chihuahua, hace 68 años.

Tendremos un Jefe de Gobierno de lujo.

 Hombre serio. Funcionario preparado. Con personalidad y carácter. En la sangre trae la lealtad del abuelo, el general Marcelino García Barragán. La entereza y fortaleza de su padre, Javier García Paniagua, quien fue precandidato presidencial.

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