Fortaleza digital con el aguinaldo
Ni benditas ni malditas
La guerra de la propaganda política-electoral en redes sociales está que saca chispas.
Las redes sociales no son ni benditas ni malditas como las han estigmatizado en los últimos años, dicen los que saben y coincidimos, pero son herramientas de comunicación de alto riesgo, ya que pueden convertirse en exitosas plataformas de despegue político o en pantanos de los que es difícil salir limpio, si no pregúntenle a #YaSabenQuien.
Un dato lapidario que muestra quién domina hoy las conversaciones en redes sociales, lo dio a conocer @XimenaCespedesA, directora de MWGroup, horas antes del arranque formal de las campañas, tome nota: Claudia Sheinbaum registró impactos en 78.5 millones de usuarios, mientras que Xóchitl Gálvez lleva mano pues sus mensajes han llegado a 91 millones de personas.
Otra cosa son las percepciones negativas o positivas de esos impactos. Mientras tanto, ya se verá en qué nivel arrancaron las candidatas presidenciales el 1 de marzo, pero de lo que podemos estar seguros es que tanto los Xochitlovers como los feisbuqueros de Claudia totalmente palacio, se darán un quién vive. Lo que no se puede ocultar son las pautas pagadas.
Olvídese del chisme que le armaron a Xóchitl por el chicle que dejó pegado en una silla, quedó en un tirititito, porque los negativos que sigue arrastrando la candidata oficialista por las obras inconclusas que ofreció terminar y la persistencia del delicado tema de la narcopolítica, le han hecho mucho daño.
Además, hay de dislates a dislates y aquí dos ejemplos: el resbalón de Claudia se convirtió rápidamente en el hashtag #QueSigalaCorrupcion cuando se le chisporroteó decir: “este 2 de junio el pueblo de México tomará una decisión histórica; solo hay dos caminos a tomar, uno que siga la corrup… la transformación o dos, que siga la corrupción”.
A Xóchitl también se le barrió el discurso y pidió a sus seguidores en un mitin de Jalisco votar el 2 de julio, cuando obvio las votaciones son un mes antes, pero las burlas de sus adversarios no hicieron tanto ruido.
No tener el dominio de la conversación en redes puede causar mucha ansiedad como es el caso de un conocido productor de narco series de tv, quien se ha quejado de que los conservadores “han tomado por asalto las redes sociales” y por eso no le replican sus comentarios.
Lo que hay que ver en estos tiempos, se conoce desde hace tiempo como la guerra negra. Un caso es este extraño hashtag teledirigido contra la candidata opositora
post en la plataforma X (hasta parece obra de los creadores del chupacabras); en contraste #QueSigaLaCorrupción en su segundo día llevaba más de 170 mil impactos.
El mal humor social y el enojo es lo más contagioso en las redes sociales, dicen los estudiosos, y son dolor de cabeza para los encantadores de serpientes.
Lo cierto es que la candidata presidencial que domine las conversaciones en el terreno de la comunicación en el ciberespacio, en estos tres meses de campaña, sin duda influirá en la decisión final de muchos electores.
1.- Tome nota, el gobierno que viene tendrá serias limitaciones presupuestales, alertan. Y no, no hay detrás un sesgo conspirativo. Como parte de su análisis
“Perspectiva Macroeconómica Global 2024” la agencia calificadora Moody´s detalla que esta situación tiene que ver con un debilitamiento de las finanzas públicas en México, consecuencia de la enorme cantidad de los recursos públicos canalizados casi sin restricciones a Pemex.
Y eso no es todo, pues si bien se espera que el país siga creciendo este año lo hará por debajo de lo alcanzado en 2023. Y aunque se han aprobado incrementos salariales no visto en muchas décadas, los gastos excesivos en este año electoral le pegarán a la inflación, así es que para variar todo estará
más caro.
2.- Y para documentar el optimismo al que debemos tomar con pinzas (vaya un tributo al legendario Monsi), el estudio más reciente de México Evalúa advierte que al cierre de 2023 el endeudamiento público creció prácticamente al doble de lo que aumentó en pasado sexenio.
Por si algo faltara los ingresos públicos aumentaron apenas en 6.7 por ciento, el peor dato alcanzado en los últimos cuatro sexenios. En contraste el gasto presupuestal de las fuerzas armadas creció en conjunto 40.1 por ciento más que en el sexenio anterior.
Lo lamentable es que mientras el gasto militarizado anda en Jauja, los segmentos de salud y seguridad pública han sido severamente recortados.
El análisis completo puede consultarse aquí:
https://numerosdeerario.mexicoevalua.org/2024/02/28/5-evidencias-sobre-las-finanzas-publicas-de-2023/
3.- Las propuestas de las candidatas presidenciales sobre las fuerzas armadas son de alto contraste.
La opositora, Xóchitl Gálvez ofreció que las fuerzas armadas regresarán a las tareas y al ámbito que por ley les corresponde. Además de devolverle la dignidad lastimada en los últimos años por la política de “abrazos no balazos”.
En tanto, la oficialista Claudia Sheinbaum respondió vagamente a este difícil tema: “El ejército seguirá el tiempo necesario”.
4.- La participación de las mujeres en la vida política nacional, plantea nuevos retos para el desarrollo de nuestra sociedad.
El acompañamiento de la red Mujeres XingonasMx a la candidata presidencial opositora le da un nuevo sentido a la política, porque va más allá del recurso propagandístico pues impulsa el voto razonado, ante el hecho de que la decisión de las mujeres en las urnas tendrá una influencia definitiva en los resultados. Verónica Juárez es el rostro a cargo de esta histórica tarea contra los viejos y no tan viejos atavismos.