ENQUADRE: Mano dura a las finanzas del narco

El gobierno del presidente Enrique Peña Nieto ha comenzado a dar los primeros pasos para  combatir las bases de la delincuencia organizada con la creación de la Coordinación General de Información y Análisis Financiero, dependiente de la Procuraduría General de la República (PGR), con lo que se podría afectar de manera importante la estructura narcoeconómica que permite el financiamiento para el tráfico de drogas, el lavado de dinero y la adquisición de armas.

A diferencia de la administración de Felipe Calderón Hinojosa, que privilegió la confrontación armada para atacar la creciente influencia de los cárteles de la droga en diversas entidades del país, sin contar para ello con una estrategia planificada, el actual gobierno ha decidido combatir a estas organizaciones en su estructura financiera, lo que dejará como resultado menos víctimas mortales y mayores daños en las operaciones de los grupos criminales.

El nuevo organismo que tendrá una estrecha colaboración con la Secretaría de Hacienda en la identificación de delitos fiscales, financieros u operaciones con recursos de procedencia ilícita, lo cual limitará la discrecionalidad con la que venían trabajando instituciones bancarias, casas de bolsa, casas de cambio, grupos financieros e inmobiliarios, que prestaban sus servicios para el blanqueo de activos.

Esta medida es complementaria de la Ley Federal para la Prevención e Identificación de Recursos de Procedencia Ilícita aprobada por el Congreso de la Unión y promulgada por el presidente Calderón al final de su gobierno.

Si bien ya se cuenta con estos instrumentos fundamentales, lo importante será su aplicación, porque es necesario reconocer que la corrupción entre grupos privados y gubernamentales protegen los intereses de la delincuencia organizada.

Otra de las medidas que ha tomado el gobierno de la República es la reforma al artículo Tercero transitorio de la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, por la cual prevé la certificación de los servidores de las instituciones de seguridad en materia de evaluación y confianza, con lo que se buscará desterrar la infiltración de los grupos criminales.

La estrategia de seguridad nacional planteada por el presidente Enrique Peña Nieto para disminuir la violencia ha comenzado a aplicarse. Son muchas las buenas intensiones, sin embargo serán los resultados los determinen la viabilidad del proyecto gubernamental.

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