Cerramos la etapa del institucionalismo neoliberal, considera Monreal
CIUDAD DE MÉXICO, 10 de octubre de 2019.- Al refrendar el compromiso de la nueva política de bienestar que tiene que ver con procurar la efectividad de los derechos sociales, la titular de la Secretaría en la materia, María Luis Albores González, aseguró que el gasto social no es como tal, es inversión social.
En comparencia ante el Pleno del Senado de la República, la funcionaria federal subrayó que el cambio de lógica es que el punto de partida no sean personas con necesidades que deban ser asistidas, sino sujetos con derechos, basados en los principios de universalidad, interdependencia, indivisibilidad, progresividad, igualdad, inclusión y cohesión social.
En su primera intervención con motivo del Análisis del Primer Informe de Gobierno, la Secretaria de Bienestar dijo que se dejaron atrás las políticas asistencialistas y fragmentadas por políticas integrales.
La nueva política de bienestar destacó que tiene un enfoque territorial, participativo y reconstructor del tejido social, se planea desde las comunidades para garantizar la apropiación de los proyectos y plantea la asociación directa con las comunidades para identificar profundamente sus necesidades más urgentes, así como el potencial productivo de cada uno de ellos.
Bajo protesta de decir verdad, enfatizó que el objetivo más importante del gobierno de la Cuarta Transformación es que en 2024 la población en México viva un entorno de bienestar, no solo en responsabilidad individual de la Secretaría a su cargo, sino de toda la administración.
Detalló a los senadores que solo en el rubro social los programas han llegado a más de 20 millones de mexicanos, gracias a una inversión de alrededor de 300 mil millones de pesos.
A 10 meses del actual gobierno, María Luisa Albores aseguró que ha puesto el máximo esfuerzo y dedicación para atender primero a los más necesitados: los pueblos indígenas, los que viven en las regiones más apartadas, los adultos mayores y las personas con discapacidad.