Gobernador a pique: ¿y dónde están la ira y obesidad de Javier Duarte?

CIUDAD DE MÉXICO, 8 de agosto de 2016.- Pareciera que ya no queda nada de la conocida actitud iracunda del gobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, quien el 1 de julio del año pasado advirtió a reporteros locales: “pórtense bien”, que lejos de considerarse un buen consejo se tomó como una amenaza, en la entidad federativa que registra el mayor número de periodistas asesinados y agredidos. (Quadratín México)

Llegó después de mediodía del pasado viernes 6 de agosto a las instalaciones de la Procuraduría General de la República (PGR), ubicadas en Paseo de la Reforma 72, en colonia Guerrero de la Ciudad de México, para formalizar y robustecer su denuncia en contra de su sucesor Miguel Ángel Yunes Linares por presunto enriquecimiento ilícito y lavado de dinero, tal y como lo hizo acompañado de diversos funcionarios estatales, alcaldes y diputados locales y federales en la Fiscalía General del estado a principios de este mes.

Sonriente, el Ejecutivo estatal de 42 años de edad bajó del asiento del copiloto de una camioneta color blanco tipo Suburban cargando un sobre manila donde acumulaba las escrituras que, según su acusación, prueban un total de 26 propiedades del gobernador electo, su esposa e hijos y empresas de la familia, patrimonio que rebasa los 400 millones de pesos.

Enfundado en un traje color gris que no fue hecho a su medida, camisa de un pulcro blanco y corbata a tono, con 34 kilogramos de peso corporal menos, atrás quedó la imagen de un mandatario estatal con obesidad al punto crítico de ser mórbida.

Entre más de medio centenar de reporteros, fotógrafos y camarógrafos que le esperaban en las inmediaciones, Javier Duarte se abrió paso, subió las escaleras e ingresó a dicha instancia de procuración de justicia para dar parte al órgano de investigación.

El fajo de hojas por denuncia de hechos que, salvo apreciación, pueden ser constitutivos de delito, fue dirigido a la Unidad Especializada en Investigación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita, y de Falsificación o Alteración de Moneda, de la PGR.

Ni 10 minutos pasaron cuando el todavía gobernador de Veracruz accedió a dar información a los reporteros que aguardaban a su salida.

De manera amable, cumplió las exigencias de los comunicadores que se aglomeraron a su alrededor para alcanzar a grabar sus declaraciones.

Enseguida, los periodistas no se hicieron esperar y empezaron a lanzar preguntas sobre la denuncia contra el candidato de la coalición PAN y PRD Unidos para Rescatar Veracruz, que derrotó al PRI en las pasadas elecciones del 5 de junio, hecho que Quadratín México informó puntualmente en el momento. (Quadratín México)

De igual manera ocurrió con las preguntas obligadas sobre su escandalosa administración pública estatal, misma que aludió el propio ex dirigente nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones Rivera, cuando el pasado 20 de junio presentó su renuncia al cargo ante miembros de la Comisión Política Permanente parafraseando a Luis Donaldo Colosio: “Lo que los gobiernos hacen, sus partidos lo resienten”.

En aquella ocasión, Beltrones lo dijo fuerte y claro: “en muchos de los casos los electores dieron un mensaje a políticas públicas equivocadas o a políticos que incurrieron en excesos, que no tuvieron conductas transparentes y que no actuaron de manera responsable. Sus respectivos partidos recibieron la sanción de una ciudadanía vigilante que premia o castiga con su voto”.

Nada debe y nada teme

Duarte asegura que actualmente su relación con el PRI “es muy buena”, sigue siendo militante de ese instituto político y es el principal interesado en que se investigue hasta sus últimas consecuencias cualquier acto de corrupción, incluyendo a él y su familia, porque, contrario al mensaje del ex líder del tricolor, asegura tener la total transparencia y no cuenta con acción ni elemento que pueda generar alguna consecuencia legal o jurídica.

Se jactó de tener una consciencia tranquila.

“El que nada debe, nada teme”, aseguró al responder que todavía no sabe si se quedará en Veracruz al terminar su gobierno, pues en estos momentos está concentrado en terminar su administración hasta el próximo 1 de diciembre, fecha en que tomará posesión del cargo el panista Yunes Linares.

“Fuera de lo que presenté en 3de3, no soy dueño de nada”

Por considerarla incompleta, el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) y Transparencia Mexicana decidieron no publicar la declaración conocida como 3de3 del mandatario veracruzano para el conocimiento de la ciudadanía y la opinión pública en general, en tanto no se emita resolución judicial al respecto.

Sin embargo, Javier Duarte refutó a esta agencia de noticias que ya presentó dicha declaración patrimonial, fiscal y de intereses.

“Yo cumplí con este deber ciudadano de presentar mi 3de3. Ellos argumentan que al estar inmerso en un proceso legal, pues no están en condiciones de aceptarla. Lo que puedo decir es que presenté en esta declaración 3de3 todo mi patrimonio. Fuera de lo que presenté, no soy dueño de nada”, insistió.

Respecto a las empresas fantasmas que el Servicio de Administración Tributaria detectó en la entidad jarocha y las 20 averiguaciones abiertas en PGR, el priista impugnó: “que investigue y que llegue a sus últimas consecuencias; entiendo que esa investigación va muy adelantada y estaré muy atento y pendiente del resultado de la misma”.

Instituciones determinarán responsabilidad de Arturo Bermudez

A la desastrosa administración estatal, se suma el recientemente escándalo de su ex secretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez Zurita, a quien en una investigación periodística se le detectó cinco residencias valuadas en 2.4 millones de dólares, en Texas, Estados Unidos.

De acuerdo a una investigación especial del portal Aristegui Noticias, el ex funcionario encargado de preservar la seguridad de los veracruzanos y su esposa Lizbeth Mendoza son propietarios de cinco residencias en el complejo The Woodlands. Las propiedades comenzaron a ser adquiridas a partir de agosto de 2012 y el último registro del que se tiene conocimiento se realizó en abril de 2016.

El priista soslayó que respecto a Bermúdez Zurita, quien también es señalado por las familias de víctimas de desapariciones en Veracruz y exigen que debe pagar por violaciones a los derechos humanos, serán las instituciones las encargadas de determinar si hubo responsabilidad en alguna de las acciones que como servidor público haya cometido.

No le salen las cuentas a la ASF

En los casi seis años del gobierno de Veracruz de Javier Duarte, a la Auditoría Superior de la Federación (ASF) presentó diversas denuncias de hechos por el probable desvío de recursos: en 2013 por cuatro mil millones de pesos y, en 2014, asciende a más de 15 mil 772 millones de pesos.

Aunque a la ASF no le salen las cuentas de la administración estatal veracruzana, el gobernador de la entidad jarocha señaló a Quadratín México que en todo caso las observaciones y las denuncias que se han presentado por las observaciones han venido desahogándose.

“Se han venido esclareciendo, y en todos y cada uno de los casos se ha venido dando la documentación que acredita el destino de los recursos públicos que el Gobierno de Veracruz ha recibido”, insistió.

Aunque en entrevista justificó que le ha tocado gobernar en tiempos complejos, se ufanó que dejará un Veracruz pujante, con una inversión como nunca antes, donde se ha venido avanzando enormemente en varias materias: en empleo, infraestructura, desarrollo agropecuario y rural, y en seguridad social.

“En materia de seguridad no puedo decir que no pasen cosas, suceden, somos un estado del tamaño de la Ciudad de México, tenemos ocho millones de habitantes”, arguyó a este reportero; y aseguró que los propios números del Sistema Nacional de Seguridad Pública demuestran un avance en esta materia, sobre todo en el combate al crimen organizado.

En un cuarto de tiempo, el ex priista Miguel Ángel Yunes llegará a próximo gobernador de Veracruz con denuncias en su contra, mismas que el ahora panista asegura que Javier Duarte se quiere “lavar la cara” acusándolo de poseer más propiedades que éste y sus cómplices.

A 113 días cuando asuma el cargo, respondió que lo difaman para desviar la atención pero no caerá en el juego, pues advirtió: “Ni Duarte ni nadie podrán detener el cambio y la acción de la justicia” que, a dos meses de haber ganado la elección, recibió el mandato de combatir la corrupción a fondo y recuperar lo que le robaron a los veracruzanos.