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CIUDAD DE MÉXICO, 6 de diciembre de 2017.- El jefe delegacional de Benito Juárez, Christian Von Roehrich, no llegó a Saratoga 714 en la colonia Portales, donde estaba programada su presencia para el reinicio de trabajos de demolición del edificio cuyo estacionamiento y primer piso quedaron aplastados a causa del terremoto del 19 de septiembre pasado.
Pese a que sí asistieron otros funcionarios especialistas en estructuras, la ausencia de Von Roehrich causó la molestia de vecinos que acudieron al lugar, ya que aún esperan sacar parte de sus pertenencias del edificio colapsado.
Incluso se armó una pequeña protesta donde una decena de vecinos gritaron «Por la honestidad, abajo los delegados corruptos».
La invitación para la demolición fue enviada por el área de comunicación social de la delegación e incluso durante su visita a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), el delegado invitó a reporteros a acudir, luego de que se suspendió el amparo solicitado por una vecina para evitar que fuera derrumbado, ya que consideraba que el inicio de obras de un predio adjunto afectó al edificio construido en 1959.
Von Roehrich aseguró en la ALDF que un dictamen de la delegación concluyó que la obra aledaña no influyó en el colapso y reiteró su invitación.
La cita estaba programada a las 17 horas, pero a las 17:07 horas comunicación social avisó que se posponía.
Quien dio la cara fue el director de Servicios y Mejoramiento Urbano, José Alberto Labastida, quien atendió las peticiones y los reclamos de los vecinos.
Uno de ellos, Víctor, quien vivía en el cuarto piso, pero en la segunda torre, la del fondo, quiso saber si puede recuperar aún algunas de sus pertenencias, y el ingeniero le contestó que sí, pero antes deben retirarse unos trozos de concreto y varilla, para garantizar su seguridad.
Otro vecino de la misma torre, del primer piso, le preguntó si habrá posibilidad de entrar por algunas de sus pertenencias, pero Labastida le recordó que el primer piso quedó aplastado.
Otra vecina le pidió la hora exacta de la demolición, y el funcionario le respondió que la ignoraba, lo que ocasionó el reclamo de la vecina porque no puede ir a la hora que a ellos se les ocurra, le expresó.
El funcionario la escuchó pacientemente y le ofreció su tarjeta de contacto y se comprometió a informarle.
El pasado 9 de noviembre la delegación permitió a los vecinos de los 16 departamentos entrar por algunas de sus pertenencias, y calculó que en cuatro días concluirían y entonces ya el edificio sería demolido, pero el ingreso de los vecinos sólo pudieron hacerlo por un día, debido al amparo 1530/2017 que ordenaba detener la demolición.
La delegación no informó cuándo será la demolición.