Mexicana de Aviación, elefante blanco que morirá: PAN
CIUDAD DE MÉXICO, 8 de marzo (Quadratín México).- Aunque pretendió matizar su augurio y personalizarlo, el panista José González Morfín, vicepresidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, previó el fracaso del proceso de elección del consejero electoral relevo de Sergio García Ramírez, quien renunció al cargo y provocó prisas en el IFE y en la Cámara baja.
Hasta la tarde-noche de este viernes, poco antes de cerrarse el plazo para el registro de aspirantes a cubrir la vacante en el Consejo General del Instituto Federal, se habían inscrito 36 postulantes en la oficina abierta ex profeso en el Palacio Legislativo de San Lázaro.
Para el próximo 18 de este mes, deberá determinarse quiénes de los registrados cubren los requisitos a efecto de proceder a la ronda de entrevistas, a celebrarse entre el 1 y el 8 de abril entrante. Luego, a más tardar el último día de abril, al cierre del segundo periodo ordinario de sesiones del primer año de la LXII Legislatura, las dos terceras partes del pleno camaral, es decir, por mayoría calificada, deberá elegir al nuevo consejero electoral, relevo de García Ramírez.
Sin embargo, el diputado federal panista y vicepresidente camaral, José González Morfín, otea el fracaso de este proceso y lo sustenta en lo ocurrido con la emisión de la convocatoria a aspirantes al cargo de consejero electoral, porque no contó con respaldo mayoritario, es decir, las bancadas del PRD y del PAN votaron en contra, mientras las fracciones del PRI, PVEM y PANAL avalaron la convocatoria.
“¿Cuál es la prisa?”, se preguntó González Morfin, para quien el plazo debió haberse llevado hasta agosto para emitir la convocatoria requerida en el relevo de otros cuatro consejeros electorales que concluyen su periodo en la encomienda.
Por ello, planteó: “Yo le auguro muy pocas posibilidades de éxito a este proceso que está en marcha, ustedes (los reporteros) vieron cómo se aprobó la convocatoria (…)se podía aprobar por mayoría simple, pero el consejero no, entonces yo no veo de dónde puedan salir dos terceras partes de los votos, estando las cosas como están”.
Para González Morfín el Consejo General bien podría haber sólo ocho de los nueve consejeros electorales en funciones, e incluso ya trabajaron con ausencia de tres consejeros. Entonces el legislador albiazul insiste en que no ve “cuál es la prisa para sacar en este momento a uno solo; no la encuentro realmente”.
Empero, personaliza la postura –“yo estoy hablando por mí”, enfatiza—y plantea si hubiera, por ejemplo, un candidato que pudiera lograr el apoyo de todos los grupos parlamentarios, que realmente fuera de consenso, que prestigiara al Consejo General del Instituto, nadie estaría en contra de que eso sucediera y que de una vez lo eligiera el pleno camaral “y estuviéramos en el mes de abril, como dice la convocatoria, llevando la propuesta al Pleno”.
–¿Un candidato nuevo?—se le plantea como opción encaminada al consenso.
–Es que no es tanto –responde–. No sé si sea la palabra sino yo creo que alguien con prestigio social, alguien que pueda ser avalado por todos y que, por supuesto, que no tenga vínculos con ninguno de los partidos políticos, eso sería muy bueno.
Pero ese es el problema, se le cita, siempre hay alguien que los vincula con un partido o provienen de un partido y lamentablemente ha sido politizado, solamente un IFE ha sido ciudadanizado, los demás son políticos de los partidos.
González Morfín replicó reflexivo por cuanto a que, a lo mejor, el reto es regresar a esa primera etapa de la ciudadanización del IFE “y buscar a los Granados Chapa, a los José Woldenberg, a aquellos de aquella primera etapa que tanto prestigiaron al Consejo General del Instituto.
“Ojalá –insistió en la entrevista en el Palacio Legislativo de San Lázaro–generáramos las condiciones para que en la próxima convocatoria, donde habrá que elegir por lo menos a cuatro o tal vez a cinco, pudiera haber realmente interés de ciudadanos con prestigio social, con conocimiento del tema, que sí los hay en la Academia, en muchos lados y que supieran que aquí no se va a privilegiar el aspecto político de cuotas o partidista de cuotas de tengo tantos diputados, me tocan tantos, sino que se va a volver al espíritu original”.
Del riesgo de empantanar la elección del consejero por la coyuntura del Pacto por México, el legislador michoacano pone a salvo de cualquier responsabilidad a su bancada e insiste:
“Creo que la forma como se impuso la convocatoria para esta elección ya fue un mal inicio para este proceso, hay que reconocerlo, por unos cuantos votos se aprobó por mayoría en el Pleno la convocatoria, quiere decir que en la Junta de Coordinación Política, donde están todos los coordinadores, todos los grupos, no había consenso para convocar, esa es una realidad, o sea, no arrancó, no se expidió la convocatoria de consenso (…)”.
No obstante, González Morfín matizó la posibilidad de que en abril no sea elegido el noveno consejero e indicó que no lo vería tanto como riesgo, “a lo mejor finalmente es una oportunidad de que se pueda hacer una amplia convocatoria y que en vez de uno sean cinco, como corresponde aprobados por la Cámara en el mes de octubre y a lo mejor en una convocatoria que se pudiera expedir tal vez en el mes de agosto, no veo cuál es la prisa para sacar en este momento a uno solo, no la encuentro realmente”.
QMX/msl/oab