Abanico
IMSS Puebla, sinónimo de compadrazgos
Por: Georgina Howard
Vaya que hace falta que los sabuesos de la Función Pública, a cargo de Irma Eréndira Sandoval, indaguen a profundidad los procesos de compra llevados a cabo en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), sobre todo porque es encomienda de la 4T eliminar toda práctica que huela a corrupción, para ello el próximo 15 de febrero asumen su cargo los 35 nuevos delegados federales del instituto.
Para muestra un botón, pues a espaldas de Zoé Robledo, se han concretado operaciones que ponen en duda la honestidad con que marcha el organismo de salud.
El malestar se habría originado con José Luis Quintana Corona, quien dejó su puesto en la Delegación Norte de Ciudad de México bajo señalamientos de irregularidades, para trasladarse a la Delegación Estatal Puebla, donde a su llegada se adquirieron consumibles de impresión bajo sospecha de moches.
Resulta que, al ocupar su nuevo puesto como Coordinador de Abastecimiento y Equipamiento, se modificaron las bases de la licitación LA-050GYR006-E564-2019 en lo que parece ser un claro movimiento para beneficiar a la empresa “Todo en Toner” con un contrato por 15 millones de pesos.
Pero el funcionario se habría encargado de asegurar la posición de la empresa amiga al informar durante el fallo que en el año que comienza no será necesario cambiar los equipos de impresión, motivo por el que “Todo en Toner” va un paso adelante, pues se encarga de proveer insumos de la marca “Brother”, precisamente con los que funcionan los equipos, es decir, le saldrá más barato proveer los consumibles sin renovar las impresoras, tal como sí a sucedido en las demás delegaciones del IMSS.
Entre los aspectos interesantes del caso resalta que Quintana Corona llegó a la entidad atraído por el anterior jefe de Servicios Administrativos, Óscar Armando Selvas Corrola, quien en últimas fechas habría dejado su posición tras una serie de acusaciones por corrupción. ¡Vaya funcionarios no!
Así, el manotazo sobre la mesa debería llegar desde el gobierno federal, pues todo parece indicar que el titular de la Delegación Estatal poblana, José de Jesús González Izquierdo, no tiene idea de lo que sucede bajo su mando.
No en balde la tarde de este miércoles (15 de enero) en sesión extraordinaria del H. Consejo Técnico del Instituto Mexicano del Seguro Social, rindieron protesta los 35 nuevos Titulares de los Órganos de Operación Administrativa Desconcentrada, antes conocidos como Delegados, quienes entrarán en funciones a partir del 15 de febrero, y tienen la misión de combatir al trípode de la corrupción que caracterizó los servicios de salud en sexenios pasados.
Ante esto, vaya paquete que enfrentará la que será la nueva delegada del IMSS en Puebla, María Aurora Treviño García, quien tendrá que utilizar toda su experiencia médica adquirida en Monterrey, en la parte de gestión médica y administrativa, además de lidiar con funcionarios como José Luis Quintana.
*** Director de Fonacot bajo escudriño
Pronto llegará el momento de que Alberto Ortiz Bolaños rinda cuentas ante el Consejo Directivo del Instituto Fonacot, pues la primera reunión de sus integrantes está programada para el próximo 31 de enero y al término de 2019 quedaron en el tintero temas delicados. Ejemplo de ello es el funcionamiento del Fondo de Protección de Pagos, el cual se quedaría sin recursos suficientes debido a su esquema de operación, ya que las aportaciones de cada acreditado no alcanzarían para cubrirlos en caso de desempleo, invalidez o fallecimiento, al tomar en cuenta de que se trata de pagos únicos que deben ser depositados en cuentas individuales, no en una bolsa común.
En caso de que existan actividades de mutualidad, se quebrantaría la Ley de Seguros y Fianzas, como se especula que está sucediendo. Mientras tanto se espera que Hacienda, de Arturo Herrera, haga lo propio e investigue el caso; misma ruta que habría de tomar la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas, de Ricardo Ernesto Ochoa.
*** ¿Incongruencias en la SFP?
TOME NOTA *** Fuentes del gobierno federal aseguran que, en cuestión de días la secretaria de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval, tendrá que concluir la investigación que le hizo al exdelegado federal en Jalisco, Carlos Lomelí, a quien no le encontraron indicios de conflicto de interés mientras fue funcionario de la 4T.
Así, en Palacio Nacional esperan la resolución porque Lomelí Bolaños es un activo que el presidente Andrés Manuel López Obrador no quiere perder. Mientras tanto, la esfera más cercana al Primer Mandatario aun cuestiona por qué Sandoval no quiso investigar el pasado de Manuel Bartlett, director de la Comisión Federal de Electricidad (CFE); no obstante, a Lomelí le “buscó por debajo de las piedras” desde el año 2015. Por cierto, Bartlett no renunció a su cargo durante la investigación; y el exdelegado sí.