Café para todos

Como cosa de milagro, de pronto el remanso de paz en que se había convertido Nuevo León durante el proceso electoral, se transformó en infierno. Fue como si se hubiera firmado algún acuerdo para mantener a los criminales alejados y de pronto se rompiera ese convenio.

Pero también parece como si los astros se hubieran alineado en sentido negativo para empezar a hacerle la vida de cuadritos al gobernador electo ¿Será que algo le quieren decir a este atrabancado personaje surgido de la crisis de la partidocracia? ¿No será que las nuevas fuerzas desplazadas con el arribo al poder de este hombre, quien se propone gobernar al margen de los partidos, reaccionan como bestias heridas?

Lo cierto es que al menos 22 personas han sido asesinadas en Nuevo León, desde el viernes último.

Lo curioso -y para no dejar dudas sobre de quienes proviene y a quienes se está enviando este mensaje ominoso-, el primer incidente ocurrió en García, una localidad conurbada de la periferia de Monterrey, donde fueron asesinadas 10 personas, y el municipio que Rodríguez gobernó entre 2009 y 2012 antes de lanzarse como aspirante independiente a la gubernatura del estado en las elecciones intermedias del pasado día 7, donde desafió al “establishment” de los partidos tradicionales.

Ese día, un grupo de hombres armados con fusiles de asalto irrumpió en un depósito de cervezas y acribilló a una decena de personas, mientras Rodríguez se hallaba en la Ciudad de México, en una entrevista con el ministro de Hacienda, Luis Videgaray.

En un mensaje por la red social Facebook, Rodríguez de inmediato señaló que la policía y las autoridades no deben “relajarse” en el tema de la seguridad sino “buscar hasta encontrar a los culpables, sin escatimar nada”.

“No deben permitir que vuelva la ola de violencia que según los actuales gobernantes todos los días dicen que está controlado”, afirmó.

“El Bronco” -quien dejó las filas del PRI donde militó por 33 años-, ha señalado su intención de integrar un equipo de gobierno con personas sin filiación partidista. Además, ha prometido sostener contacto personal con legisladores locales y alcaldes, sin la mediación del PRI y del Partido Acción Nacional (PAN).

Siguiendo la espiral de violencia, el domingo pasado fueron arrojados tres cadáveres en el municipio de San Pedro, donde viven algunos de los hombres más acaudalados del país.

Tres días antes, habían sido de baja 20 policías municipales por lo que se cree que en este caso las muertes se deberían a esta circunstancia, aunque no se descarta que sea parte del mensaje de los criminales al futuro gobernador.

El actual mandatario estatal, Rodrigo Medina, del PRI, anunció que se instalarán puestos de control en rutas y avenidas de Nuevo León, ante este rebrote de violencia, como el que sacudió al estado entre 2011 y 2012.

“Vamos a tener operativos especiales en la ciudad y en la región limítrofe con Tamaulipas”, afirmó Medina, quien atribuyó los asesinatos a las actividades de venta de droga al por menor.

Nuevo León es uno de los estados que en etapas recientes ha figurado en las zonas más castigadas por el crimen por su ubicación estratégica, en el límite con Estados Unidos y sus fronteras con Tamaulipas, quizá la zona con mayores niveles de violencia de los últimos tiempos.

“El Bronco” es el principal de los cinco candidatos independientes que lograron ganar las elecciones en el país luego de que se aprobó esta figura en el Congreso, de un total de 125 candidatos que decidieron lanzarse al margen de los partidos tradicionales.

En Rodríguez -ganó con 26 por ciento de diferencia frente a la candidata del PRI, Ivonne Álvarez-, se han cifrado grandes expectativas porque gobernará el segundo estado más rico de México después de la capital.

De manera que se podrían hacer múltiples lecturas de a quién le sirve que Nuevo León vuelva a ser el polvorín que fue hasta hace muy poco.

Quizá las organizaciones criminales dominantes en la región norte del país pretendan darle a entender a “El Bronco” que tendrá que arreglarse con ellos o de lo contrario le harán la vida imposible.

Cualquiera que sea la respuesta, lo verdadero es que Nuevo León y particularmente Monterrey y su zona conurbada, vuelven a estar en la mira de la delincuencia y a figurar en los titulares de los noticieros.

Pero más le valdría al actual gobernador Medina imponer el orden otra vez en el estado, porque todavía está a cargo y los ciudadanos le cargarán el saldo en contra a la autoridad actual.

La indignación de los regios por el desgobierno del mandatario -quien aspiraba a postularse a la grande y que ahora lo más que anhela es librarse de la cárcel-, cada día es mayor.

Conviene al mandatario allanar el camino para un traspaso de gobierno de terciopelo, una transición suave que permita a un hombre como “El Bronco” asumir las riendas de manera institucional y mostrar que los tiempos de campaña ya terminaron y ahora deberá comportarse como un estadista y demostrar que puede hacer realidad las promesas que hizo a los ciudadanos y que no los va a defraudar.

Ya en agosto del 2011, un incendio en el Casino Royale de Monterrey, provocado por un comando que roció gasolina y provocó la muerte de 61 personas, aterrorizó al estado y conmocionó al país.

En febrero del 2012, hubo una matanza de 44 reos en el penal de Apodaca, periferia de Monterrey. Dos meses después, el 13 de mayo del mismo año, fueron arrojados 49 cadáveres en una carretera de Cadereyta, Nuevo León.

Esos capítulos sombríos de la historia reciente de Nuevo León parecían haber quedado atrás como una mala pesadilla, pero el fantasma de la violencia ha vuelto a emerger.

El tema no es menor y también debería ser considerado como parte de las prioridades en la agenda de seguridad del gobierno federal, porque Nuevo León ha sido mencionado por todos como un modelo de éxito en el combate al crimen organizado.

Un reporte difundido por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) en febrero pasado, arrojó que los delitos en Nuevo León se redujeron un 14 por ciento en 2014. Además, fue una de las 10 entidades que logró mayores éxitos en la disminución de los delitos contra la salud, así como los relacionados al narcotráfico, los grupos criminales y los ilícitos cometidos por servidores públicos, entre otros.

Sin embargo, hoy parece que la entidad volverá a ubicarse entre los más violentos, a la par de Jalisco, Guerrero y Tamaulipas. Ojalá que éste haya sido sólo un mal fin de semana y no el augurio de que vienen cosas peores.

GRANOS DE CAFÉ

Para reafirmar su compromiso de brindar atención médica y auxilio a la población que así lo requiera y fortalecer la capacidad de respuesta en caso de emergencia, el gobernador Manuel Velasco Coello hizo ayer entrega de 20 ambulancias de última generación al Sistema Estatal de Protección Civil, con una inversión de 20 millones de pesos proveniente del Fondo Municipal de Protección Civil.

Durante el acto, el Ejecutivo estatal señaló que con estas acciones se busca brindar atención médica a la gente en el lugar mismo donde se requiera y realizar los traslados a las clínicas y hospitales de manera pronta y segura porque, dijo “la diferencia entre salvar la vida de un ser humano, es actuar a tiempo y entendemos que una de las formas más efectivas para que la protección civil continúe dando resultados es dotar a sus elementos de las herramientas necesarias para que cumplan con su labor.

Aseguró que no se puede soslayar que Chiapas es uno de los estados más expuestos a los fenómenos meteorológicos y naturales, y “nuestras autoridades municipales son el primer frente de acción del Sistema Estatal de Protección Civil, por lo que requieren y necesitan todo nuestro apoyo y respaldo”. Enfatizó que por ello se seguirá consolidando la red de Protección Civil que funciona en todo el estado, con más de 5 mil Comités de protección y de prevención y participación ciudadana. “Tan sólo en este año hemos invertido en este rubro más de 242 millones de pesos”, explicó en una ceremonia efectuada en la sede de las instalaciones de protección civil ubicada en Terán.

Velasco Coello, confirmó que Chiapas es el único estado del país en contar con un instrumento como el Fondo Municipal de Protección Civil para fortalecer en todos los Municipios las tareas de prevención, capacitación y sobre todo de ayuda humanitaria y equipamiento…

…Con muchos bríos, Fernando Castellanos Cal y Mayor -candidato del PRI-PVEM a la presidencia de Tuxtla Gutiérrez-, concluyó su primera semana de campaña política, con vistas a las elecciones que tendrán lugar el próximo 19 de julio.

Su propuesta es la creación de empleos a través del fortalecimiento y desarrollo de la obra pública y reforzar la seguridad.

En extenuantes jornadas de trabajo que concluye por la madrugada en su oficina de campaña, el joven político anunció que durante su administración, una de sus principales metas será rehabilitar o pavimentar una cuadra cada día, a fin de devolverle a la capital chiapaneca el lustre que le arrebataron pasadas administraciones municipales y castigar a quienes depredaron la hacienda municipal, “caiga quien caiga”, dijo.

En abierta alusión al edil Yassir Vázquez Hernández -quien en julio de 2011, durante el sexenio de Juan Sabines Guerrero, obtuvo autorización para contratar un crédito por más de 275 millones de pesos para realizar la transformación urbana de Tuxtla Gutiérrez, mediante el fallido y desastroso programa “Que viva el centro”, que llevó a la quiebra a centenares de comerciantes-, aseguró que solicitará una investigación profunda y el ejercicio de las acciones legales pertinentes para que no vuelvan a repetirse este tipo de acciones en perjuicio de la población tuxtleca.

En la contienda local participan -además de Castellanos Cal y Mayor-, Carlos Esquinca Cancino, de Mover a Chiapas; Alejandra Peralta Velasco, de Movimiento Ciudadano y Francisco Rojas Toledo, del Partido Acción Nacional, quien ya ocupó este cargo municipal. Cabe destacar que este candidato, fue recientemente exhibido a nivel nacional en una videograbación, al momento de recibir gruesos fajos de billetes por parte de un empresario constructor de Puebla, a cambio de supuestas “gestorías” por obras públicas.

Rojas Toledo se guardó el dinero en una caja de zapatos y posteriormente, obligado ante la evidencia exhibida, dijo que la suma -que algunos estiman en más de un millón de pesos, por lo voluminoso de los paquetes-, sería destinada a la implementación de brigadas médicas y daría pruebas de ello. Sin embargo, hasta el momento no ha justificado la procedencia legal, ni el destino del dinero recibido.

Su campaña política la ha realizado mayormente a través de Internet, enfocando sus esfuerzos en denostar la carrera política de sus adversarios, especialmente la de Fernando Castellanos Cal y Mayor, quien a su vez exigió respeto y el cese de las descalificaciones y la guerra sucia.

“Es tiempo no de diatribas y denostaciones, sino de trabajar unidos por Tuxtla Gutiérrez”, aseguró el candidato del PRI-PVEM. Sus comentarios envíelos a: [email protected]