Contexto/Fernando Ramírez de Aguilar L.

La pandemia y la economía XCXVII…

AMLO mantiene desde su púlpito la denostación contra quienes critican sus programas gubernamentales

Nadie le puede quitar el derecho a Andrés Manuel López Obrador para dar su versión de muchos asuntos del orden público y porque tomó ciertas decisiones. Sin embargo, como primera autoridad del país, no tiene porque, desde su púlpito de poder, denostar, descalificar, agredir, insultar, vejar o minimizar a personas, instituciones independientes o sectores de la sociedad que han esgrimido otros argumentos en contra de sus programas gubernamentales o decisiones polémicas que afectan a millones de personas. Tampoco tiene porque mentir de manera falaz ante un grupúsculo de sedicentes periodistas que todas las mañanas le hacen el juego y son muy pocos los verdaderos reporteros que le hacen preguntas que interesan a millones de mexicanos.

Su desprecio por el respeto a la ley y a la Constitución es más que evidente. Es verdaderamente lamentable que quien ostenta la presidencia de la República sea el primero en violar flagrantemente la Constitución y las leyes secundarias que cuando tomó posesión juró respetar y hacer respetar. Hay que recordar que cuando fue jefe de gobierno de la capital, la Cámara de Diputados lo llevó a juicio político por no haber respetado una resolución definitiva de amparo. Independientemente de la intervención del entonces presidente el panista Vicente Fox Quesada y el presidente de la Corte, Mariano Azuela Guitrón, el hecho es que López Obrador se pasó por el arco del triunfo una suspensión definitiva de amparo que le impedía continuar una calle en Santa Fe.

Como lo planteamos desde la semana anterior, los niveles de violencia en la mayor parte del territorio nacional están incontrolables, prácticamente el país está en guerra. Esto ya está afectando, los niveles de inflación, los precios de los alimentos básicos y el empleo, independientemente del cambio climático, la falta de lluvias y los precios de los combustibles. Muchas zonas del país, los sectores campesinos han dejado de producir granos.

Aunado a ello, la ineficacia de la guardia nacional, la Marina y el Ejército que han sido maniatados con esa absurda política “de abrazos no balazos” o de que los delincuentes también “tienen derechos humanos” a costa de las vidas de miles de inocentes ciudadanos que han sido sacrificados o han dejado todo en sus lugares de origen para huir de tremendas atrocidades de los grupos criminales, han puesto algunas entidades federativas al mismo nivel de Ucrania, sin exagerar. 

Asimismo, tanto México como los países centroamericanos no cuentan con una estrategia para tener una política conjunta que atienda las causas y efectos del fenómeno migratorio, y que principalmente deberían enfocarse a atacar el tráfico de personas que es el gran negocio junto con el tráfico de drogas y armas, del crimen organizado. 

En el primer semestre de este año, la dinámica transfronteriza, entre México y los Estados Unidos, registró un incremento del 53 por ciento en las detenciones al sur de Estados Unidos, respecto al mismo periodo de 2021, al sumar 542 mil detenciones registradas. 

En cuanto a la inseguridad, el gobierno de lo López Obrador cree que con “cifras alegres” podrá paliar la incertidumbre colectiva. Ayer, Rosa Icela Rodríguez Velázquez, secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, dijo que seis entidades continúan concentrando casi el 50 por ciento de homicidios dolosos. Son: Michoacán, Guanajuato, México, Baja California, Jalisco y Sonora. Se sigue en la coordinación con esos estados, en donde en Michoacán se sigue registrando la tendencia al alza con una disminución en este último mes de abril.

En cuanto al robo de hidrocarburos, dijo que el combate continúa contra este delito y continúa arrojando resultados alentadores. De 72 mil barriles que se robaban al principio de la administración, se ha bajado a 6.7 mil barriles diarios y el ahorro estimado es de más de 206 mil millones de pesos, y diariamente el ahorro es de 165 millones de pesos con las medidas preventivas. Está el tema de los operativos para la prevención de la toma de casetas, y se lleva aquí un ahorro, evitando la pérdida de más de seis mil millones de pesos y del 2020 al 2022 un ahorro de 30 mil 238 millones de pesos.

Hemos dicho y seguimos sosteniendo que los diversos grupos de delincuencia organizada, con la complicidad condicionada, amenazada o complaciente de autoridades estatales y municipales, poco a poco se han ido apoderando de importantes zonas del país. Ejemplos sobran: Quintana Roo, Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Michoacán, Jalisco, Sinaloa, Sonora, Chihuahua, Zacatecas, Guanajuato, Veracruz, Tamaulipas y ahora, Nuevo León. Eso, sin contar con la zona conurbada del estado de México.

El problema, es que no se ha frenado el número de personas asesinadas y desparecidas. Además, los grupos delictivos han provocado una obligada diáspora, generando un éxodo fronterizo al norte del país, al huir de la violencia y de las amenazas de los grupos beligerantes, lo que ha tenido consecuencias en las cosechas de granos, frutas y verduras; la producción agropecuaria y el abandono inexorable de tierras productivas, como las zonas limoneras, naranjeras, aguacateras y arroceras, en Michoacán y Guerrero, o de frijol y maíz en Zacatecas. Pero de eso, no habla el gobierno federal.

Puras habladas y mentiras…y ahora, no están pagando las pensiones a los adultos mayores regularmente bajo el argumento de que hay una veda electoral. En fin.

 Y sobre los desaparecidos. La semana pasada una reportera le preguntó:

–presidente, y una segunda pregunta, también recientemente se da a conocer que México ya rebasó la cifra de 100 mil desaparecidos, un incremento de 30 por ciento durante su gobierno, 2021, hasta nueve mil desaparecidas. ¿Qué se va a hacer para contener esta cifra?

Presidente Andrés Manuel López Obrador: Pues se está haciendo un trabajo como nunca de búsqueda. Ningún gobierno se había ocupado de los desaparecidos como ahora, toda la Secretaría de Gobernación está dedicada a eso, y a buscar fosas clandestinas, porque no se debe de olvidar de que hubo una guerra contra el narcotráfico y durante esa guerra murieron muchos, y los desaparecían. Entonces, nosotros cuando llegamos, asumimos la responsabilidad de buscarlos y de ayudar a los familiares, y es lo que estamos haciendo, sin ocultar nada.

–Pero ¿a qué atribuye este incremento durante su gobierno también?, o sea, que haya… 2021 aparece con nueve mil desaparecidos.

López Obrador: Puede ser que los buscamos y que antes no. Es algo parecido al feminicidio, que antes no se consideraba como un delito con esas características los asesinatos de mujeres, y a partir de que llegamos se empezó a clasificar. Que es también otra nota, ¿no? de toda la prensa conservadora, hipócrita, que cuando se desató la guerra en el tiempo de Calderón, en vez de oponerse y de repudiar esa decisión fatal, la aplaudieron. Aquí lo hemos visto varias veces, en el índice de letalidad. ¿Por qué no lo vuelves a poner…Si esto es lo formal, imagínense lo que no se daba a conocer, ¿lo que pasaba y no se sabía? Eso fue una guerra, esto apenas son los enfrentamientos registrados y estos son los muertos registrados en agresiones con Fuerzas Armadas, mil 76 agresiones en el 2011, mil 76. Y miren, heridos y detenidos, menos que muertos, ¿por qué?, porque los remataban, porque era una guerra. Ahora, si esto pasa en la formalidad, ¿qué sucedía en la clandestinidad? ¿Qué, no es suficiente?

Ojalá tuvieran un poco de vergüenza nuestros adversarios para que un día, en un análisis autocrítico, le pregunten a Calderón por qué solapó a García Luna y por qué lo convirtió en su brazo derecho, su secretario de Seguridad. ¿Por qué no se habla de eso… ¿Es como ahora, lamentable, lamentable, lamentable lo del asesinato racista en Estados Unidos? ¿Dónde está el documento de protesta de los diputados de la Unión Europea? Pero en general, ¿dónde está la información? Se minimizó, cuando es un asunto gravísimo, doloroso.